María Eugenia Alsina, médica especialista en ginecología oncológica, ha regresado a su tierra natal en Posadas, Misiones, después de completar su formación en Buenos Aires. Su historia es un testimonio de pasión por su profesión y un compromiso con el bienestar de las mujeres en su comunidad.
Alsina, oriunda de Posadas, Misiones, completó sus estudios de medicina en la Universidad de El Salvador en Buenos Aires. Tras graduarse en 2013, se embarcó en la especialidad de Ginecología y Obstetricia, realizando su residencia en el Hospital de Agudos José María Pena. Su fascinación por la ginecología oncológica la llevó a continuar su formación en el Instituto de Oncología Angel H. Roffo, donde realizó el posgrado de Ginecología oncológica.
Durante su formación, Alsina siempre mantuvo presente su deseo de regresar a su tierra natal para contribuir al abordaje de las complejas patologías ginecológicas que afectan a las mujeres de Misiones. Con un enfoque particular en el cáncer de cuello uterino, una de las principales causas de mortalidad en la región, Alsina reconoce la importancia de la prevención y el tratamiento oportuno en la lucha contra esta enfermedad.
«Siempre supe que iba a volver a Misiones», afirma Alsina. Su conexión con su tierra natal y su profundo compromiso con la salud de las mujeres la impulsaron a regresar una vez completada su formación. Consciente de los desafíos que enfrenta en su camino, está decidida a contribuir con sus conocimientos y experiencia para mejorar la atención médica en la provincia.
Después de completar una formación académica y profesional sólida en Buenos Aires, María Eugenia Alsina ha regresado a su tierra natal en Posadas, para embarcarse en una nueva etapa de su carrera médica. Su decisión de regresar está impulsada por una combinación de amor por su tierra natal y un deseo de contribuir al bienestar de las mujeres en la región.
«Cuando sentí que mi formación en Buenos Aires, se terminó, decidí volver acá».
Alsina considera que hay un aumento en el compromiso de sus colegas y grupos de la sociedad civil en cuestiones relacionadas con la salud de las mujeres. El interés en perspectivas de género, derechos sexuales y reproductivos está en aumento, lo que refleja un cambio en la visión colectiva de la salud integral de la mujer en la provincia, consideró la profesional.
Su regreso a Misiones también evoca recuerdos de sus propias experiencias como estudiante fuera de su ciudad natal. Aunque enfrentó desafíos y momentos de angustia, aseguró que siempre contó con el apoyo de su familia, quienes la alentaron a perseverar y seguir adelante en su camino hacia el éxito. Maria Eugenia contó que en días de crisis, llamaba a sus familiares quienes la aconsejaban «Llora, gritá, pegate un ducha y mañana seguí». «Volver sin terminar mi especialización nunca fue una opción», dijo.
El camino hacia la excelencia médica: la pasión y el compromiso
El viaje de María Eugenia Alsina hacia la medicina es una historia de determinación, amor por el aprendizaje y un firme compromiso con el bienestar de sus pacientes. Su regreso a Misiones marca el inicio de una nueva fase en su carrera, donde espera hacer una diferencia significativa en la lucha contra el cáncer ginecológico.
Actualmente, Alsina está enfocada en unirse al equipo del Hospital Madariaga, donde podrá trabajar en estrecha colaboración con otros especialistas oncológicos para proporcionar una atención integral a sus pacientes.
Por otro lado, Alsina reconoce el valor de la comunicación en la relación médico-paciente y se esfuerza por mantenerse conectada con la comunidad a través de medios de comunicación locales.
En este sentido, considera que en un mundo donde la información abunda y la verdad a menudo se diluye en un mar de opiniones, los profesionales de la salud enfrentan el desafío de reconstruir la confianza y la conexión con sus pacientes. María Eugenia Alsina reflexiona sobre la evolución del vínculo médico-paciente y aboga por un enfoque más colaborativo y empático en la práctica médica.
«Es necesario revisar nuestra forma de comunicarnos con los pacientes», señala Alsina. En una era donde la autoridad médica ya no se acepta de manera automática, según dijo, considera que los profesionales de la salud deben adoptar un enfoque más inclusivo y participativo, fomentando un diálogo abierto y transparente con aquellos a quienes sirven.
Alsina reconoce que la medicina paternalista del pasado ya no es efectiva en un mundo donde el acceso a la información es omnipresente. «Los pacientes buscan respuestas rápidas y soluciones inmediatas, a menudo recurriendo a fuentes no confiables en su búsqueda de alivio. En respuesta, los profesionales de la salud deben priorizar la escucha activa, la empatía y la colaboración en la toma de decisiones médicas» dijo.
«Es hora de reconocer nuestras limitaciones y buscar el apoyo de nuestros colegas cuando sea necesario», afirma Alsina
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— misionesonline.net (@misionesonline) March 18, 2024
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