Cambios en la Celo: tras seis meses de gestión, Maximiliano Conil renunció a la presidencia

Ayer por la mañana se hizo público que el presidente de la Cooperativa Eléctrica Limitada de Oberá (CELO), Maximiliano Conil, presentó su renuncia al cargo después de seis meses de gestión, sucediendo a la renuncia previa del gerente general, Emanuel Machado. La sucesora será la vicepresidente, Karina Derna. 

El ahora ex presidente de la Celo, atribuyó su dimisión a diversas ofertas laborales recibidas desde el sector privado. Argumentó que no podía conciliar sus compromisos en la CELO con sus actividades privadas.

La gestión de Conil estuvo marcada por controversias desde su designación a principios de junio. Su asunción, junto con la de Derna, ocurrió después de que la totalidad de la comisión directiva de la entidad presentara su renuncia el 7 de junio, a solicitud del síndico Carlos Syniuk, en medio de las persistentes dificultades económicas de la cooperativa. A pesar de los esfuerzos de los nuevos directivos, la CELO aún enfrenta la intervención de sus cajas por parte del Ministerio de Acción Cooperativa de Misiones.

 

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Cerca de un mes después, los socios de la CELO solicitaron la renuncia de Conil, Derna y del síndico mediante una nota, argumentando la violación del artículo 47, inciso a, del estatuto social de la cooperativa, que establece una antigüedad mínima de dos años como socio para ser consejero.

A pesar de que el nombramiento de Conil y otros directivos tenía como propósito sanear las irregularidades de la cooperativa, estos esfuerzos fueron opacados por cuestionamientos durante su medio año de gestión.

A principios de mes, un centenar de socios se congregó para exigir la renuncia del síndico Carlos Syniuk y la convocatoria a elecciones para un nuevo Consejo de Administración. Mariela Skrypczuk, una de las líderes de la manifestación, expresó la frustración de la comunidad, señalando la falta de agua y electricidad y enfatizando la no conformidad con la falta de cumplimiento del estatuto por parte de los representantes actuales.

Estos reclamos se repitieron durante una audiencia pública convocada por el Concejo Deliberante de Oberá para analizar un convenio entre la Municipalidad y la Cooperativa Eléctrica, que busca aumentar la tarifa de alumbrado público. Durante la audiencia, se destacó que Conil se hizo socio días antes de asumir, pagando una suma inferior a $3,000, mientras que otros socios deben abonar alrededor de $500,000. Además, se criticó la demora en el llamado a asamblea y la falta de transparencia en los balances y la deuda de la cooperativa.

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