En el marco de la Semana de la Lucha Contra la Muerte Súbita, Alejandro Guerrero Kampf, coordinador provincial de los programas de Reanimación Cardiopulmonar (RCP) en Misiones, destaca la importancia de reconocer los síntomas y actuar rápidamente para salvar vidas. La muerte súbita, un fenómeno que afecta a miles de personas en la Argentina, es un tema urgente y vital en el que se busca crear conciencia y brindar información clave.
Guerrero Kampf, enfatiza que la muerte súbita es un término que encapsula situaciones impactantes e incomprensibles, donde individuos aparentemente sanos colapsan sin previo aviso. «Hasta recién estaba todo bien y de repente, sin desencadenantes aparentes, esa persona se cae al piso y si alguien no hace algo, se muere», explica.
En Argentina, esta preocupante realidad afecta a alrededor de 40.000 personas al año, equivalente «a una caída» cada 13 minutos. Guerrero Kampf destaca que estas situaciones no siempre están relacionadas con obstrucciones de la vía aérea o problemas de salud previos, como suele ser en otros casos de muertes repentinas. La muerte súbita se caracteriza por su falta de explicación aparente.
Síntomas previos
Uno de los aspectos más cruciales que Guerrero Kampf subraya es la presencia de síntomas previos al colapso. Estos pueden incluir un dolor opresivo en el pecho, que algunos describen como si estuvieran siendo apretados. Además, menciona sensaciones inusuales en el brazo izquierdo, que van desde pesadez hasta hormigueo, así como malestares en la boca del estómago y necesidad urgente de ir al baño, pero sin éxito. «Muchas personas fueron encontradas muertas en el inodoro, porque el síntoma te hace sentir como si quisieras ir al baño» dijo.
El coordinador provincial de los programas RCP de Misiones resalta que estos síntomas, en muchas ocasiones, son indicadores tempranos de un problema cardíaco inminente. Es vital que las personas se mantengan alerta y no pasen por alto estas señales, ya que actuar dentro de la primera hora puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte.
Guerrero Kampf hace un llamado a la población a estar preparado para actuar en caso de presenciar estos síntomas en alguien cercano. «Recomendamos llamar a la ambulancia de inmediato a través del número gratuito 107, que puede ser marcado desde cualquier celular, independientemente de si tiene o no crédito» sostuvo.
En esta lucha constante por prevenir y responder adecuadamente a la muerte súbita, la Unidad Central de Emergencia y Traslado ha desempeñado un papel crucial. Según el profesional el sistema de emergencia está diseñado para ser accesible y eficaz. «Llamas por teléfono y la ambulancia va a tu casa», explicó. Los profesionales de la salud evalúan la situación y realizan un electrocardiograma. Si los resultados no muestran anomalías, el episodio se considera bajo control. No obstante, si existe alguna sospecha, el paciente es trasladado al hospital para una evaluación más exhaustiva.
Aunque es comprensible que las personas puedan sentir aprehensión ante la posibilidad de una emergencia médica, el coordinador hace hincapié en que es mejor prevenir y actuar con rapidez. «Lo mejor que puede pasar es que vaya la ambulancia o las motos», señala. En algunos casos, la evaluación médica en el lugar puede descartar problemas graves y proporcionar tranquilidad. Esta intervención temprana puede marcar la diferencia entre una situación manejable y una emergencia crítica.
En la provincia de Misiones, la capacitación es una herramienta clave en la lucha contra la muerte súbita. Las sesiones de formación se llevan a cabo de manera constante y abarcan diversos sectores de la comunidad. A través de hospitales, centros de salud y otros espacios, se busca educar a la población sobre cómo reconocer los síntomas y actuar en consecuencia.
Guerrero Kampf, destacó la importancia de que todos tengan conocimientos básicos para mejorar las posibilidades de éxito en un momento crítico.
«La tasa de éxito mejora mucho más si sabes cómo actuar», resalta Guerrero Kampf y agregó: «En el contexto de la muerte súbita, donde los síntomas pueden variar y la situación puede cambiar rápidamente, tener la capacidad de realizar maniobras de Reanimación Cardiopulmonar (RCP) puede ser la diferencia entre la vida y la muerte».
Por este motivo, hace un llamado a la comunidad a estar informada y preparada para enfrentar estos escenarios, ya que cada minuto cuenta cuando se trata de salvar vidas.
La Semana de la Muerte Súbita en Misiones que se desarrolla del 21 al 27 de agosto, no solo busca crear conciencia, sino también empoderar a las personas para que estén listas para actuar ante una emergencia cardíaca. Con capacitaciones y acciones educativas, la provincia está dando pasos firmes hacia la reducción de las tasas de muerte súbita y la promoción de una comunidad más segura y solidaria.
Tecnología y formación para mejorar las oportunidades de supervivencia
Alejandro Guerrero Kampf recalca que estar preparados para actuar en situaciones de muerte súbita puede marcar la diferencia entre la vida y la pérdida de un ser querido. Según sus palabras, «puedo salvar a uno de cada cuatro sin ninguna lesión». Esto significa que una cuarta parte de las personas que sufren un episodio de muerte súbita podrían ser rescatadas sin sufrir daños. En otros casos, aunque con lesiones debidas a la falta de oxígeno en el cerebro, la intervención también puede tener éxito.
El uso de un Desfibrilador Externo Automático (DEA) es una de las piezas clave en la mejora de las tasas de supervivencia. Guerrero Kampf destaca que la incorporación de estos dispositivos podría elevar la tasa de éxito al 90%. Esto significa que de cada diez personas que experimentan un colapso repentino, hasta nueve podrían ser salvadas en condiciones óptimas. Las ambulancias están equipadas con desfibriladores, pero también existen desfibriladores automáticos independientes que son accesibles para un público más amplio.
El coordinador de los programas RCP de Misiones subraya que los desfibriladores automáticos son muy intuitivos y accesibles para la población en general. Estos dispositivos pueden guiar a las personas a través del proceso de resucitación, brindando instrucciones claras y visuales. «Te dice saque la paleta y coloca, retira la ropa y coloca arriba del pecho las paletas», explica Guerrero Kampf. Las instrucciones son acompañadas por indicaciones visuales, como gráficos que indican exactamente dónde colocar las paletas.
En contraste, los desfibriladores que se encuentran en las ambulancias están diseñados para su uso por médico personal y requieren de interpretación del gráfico cardíaco. Guerrero Kampf destaca la importancia de conocer la diferencia entre estos dispositivos y usar los desfibriladores automáticos en casos de emergencia en el público en general.
La formación continúa, fundamental en la lucha contra la muerte súbita
Guerrero Kampf menciona que se llevan a cabo capacitaciones periódicas en toda la provincia de Misiones, no solo en entornos médicos, sino también abiertos a la comunidad. La educación sobre cómo actuar de manera efectiva puede empoderar a las personas y aumentar las posibilidades de salvar vidas en situaciones de emergencia.
La combinación de tecnología accesible y educación adecuada puede transformar la respuesta ante la muerte súbita. En este sentido, aseguró que Misiones está dando pasos concretos hacia la reducción de las tasas de mortalidad por esta causa, y cada vez más personas se suman a la lucha por crear una comunidad más segura y consciente de la importancia de actuar rápidamente en situaciones críticas.
Democratizando el acceso y cambiando actitudes para salvar vidas
La simplicidad de los desfibriladores automáticos se convierte en una herramienta fundamental en situaciones de emergencia, proporcionando claras instrucciones sobre las acciones a seguir. Según Guerrero Kampf, las opciones son claras: realizar el masaje cardíaco, aplicar una descarga eléctrica o abstenerse de intervenir si se considera necesario. Los desfibriladores incluso indican visualmente dónde colocar las paletas y cuándo accionarlas, haciendo que la respuesta sea lo más efectiva posible.
La presencia de desfibriladores automáticos en lugares de concurrencia masiva, como aeropuertos y terminales de colectivos, es requerida por la ley. Sin embargo, no están tan extendidos como se desearía. Guerrero Kampf señala que, si bien son dispositivos costosos, su valor para salvar vidas es incalculable. Compara la inversión en un desfibrilador con otros gastos cotidianos y resalta que esta tecnología podría marcar la diferencia entre una tragedia y una historia de éxito.
La muerte súbita no discrimina y cualquiera puede ser víctima de ella. La noción de que «a mí no me va a pasar» es un mito peligroso, dijo.
Como menciona el experto, muchas veces se enfrentan situaciones en las que personas no llevan casco, están bajo los efectos del alcohol o las drogas, o carecen de licencia de conducir, poniendo en riesgo sus vidas y las de los demás.
En el caso de la muerte súbita, la prevención y la respuesta rápida pueden cambiar el rumbo de la historia. Guerrero Kampf recalca que cada uno de los salvamentos sin lesiones puede marcar una diferencia significativa en las estadísticas de muerte súbita.
Por otra parte, el profesional lamentó que hay quienes no entienden la importancia del llamado responsable, por lo que no todos los llamados de emergencia son verdaderos incidentes. Guerrero Kampf destaca que de las aproximadamente 400 llamadas diarias que reciben las ambulancias en Posadas, tres cuartas partes resultan ser falsas alarmas. Esto pone de manifiesto la importancia de la precisión y la responsabilidad al comunicar situaciones de emergencia.
Asimismo, contó que con el enfoque en la estadística y la información precisa, Misiones está construyendo una base de conocimiento sólido para abordar los desafíos relacionados con la seguridad en las carreteras y, en última instancia, reducir los accidentes y salvar vidas. Los datos recopilados son una herramienta invaluable para la toma de decisiones basada en evidencia y la promoción de un entorno más seguro para todos los usuarios de la vía pública.
«La labor de la Coordinación Provincial del Programa de RCP en Misiones va más allá de los hospitales y se extiende a la comunidad en general. Es importante llevar a cabo la capacitación en Reanimación Cardiopulmonar (RCP) fuera del ámbito hospitalario y lugares donde la gente vive y trabaja» dijo.
Por este motivo, las capacitaciones en RCP se brindan en diversos lugares, desde colegios hasta guarderías y otras instituciones.
Para solicitar una capacitación en RCP, Guerrero Kampf dijo que las personas pueden dirigirse al Ministerio de Salud Pública de Misiones, en el tercer piso, Secretaría Privada dirigida la nota al Ministro Secretario de Salud Pública, Oscar Alarcón, pidiendo una capacitación en RCP. señaló. La solicitud se procesa y se incorpora a la agenda de capacitaciones, siempre teniendo en cuenta la disponibilidad y los horarios.
Sin embargo, Guerrero Kampf enfatizó que las capacitaciones no deben ser con fines de lucro y deben ser en instituciones o entidades del Estado Provincial. Esto asegura que el conocimiento de RCP llegue a la comunidad sin barreras económicas y que el enfoque sea la educación y la formación, en lugar de cualquier interés financiero.
Aunque la prioridad de la coordinación es la parte hospitalaria, también están comprometidos en extender la formación en RCP a todos los rincones de la provincia.
«En la lucha contra la muerte súbita, cada minuto cuenta. Hay que actuar de manera rápida y efectiva en situaciones de emergencia. En ese minuto que pasa se muere promedio 1 millón de neuronas. Esto significa que cada segundo cuenta y que, a medida que pasa el tiempo, las posibilidades de una recuperación exitosa disminuyen. Por ejemplo, si han pasado cuatro minutos desde que ocurrió el incidente, las probabilidades de supervivencia disminuyen en un 70%» remarcó.
La dimensión del daño cerebral también es un tema crucial en estos casos. Guerrero Kampf menciona síntomas como la cara caída, dificultades para hablar y caminar, que son signos de un daño cerebral transitorio. Este tipo de daño ocurre entre el minuto cuatro y el minuto seis después del incidente. A medida que el tiempo avanza, el riesgo de daño cerebral permanente aumenta considerablemente.
«Si no hiciste nada y llega al minuto diez, tenés 10 millones de neuronas muertas», señala Guerrero Kampf. Esta cifra de alarma subraya la urgencia de la intervención temprana en situaciones de emergencia. El tiempo es esencial para minimizar las consecuencias y aumentar las posibilidades de supervivencia sin daño cerebral permanente.
El experto hace hincapié en la necesidad de actuar sin demora, sin importar las circunstancias. «La respuesta rápida de la ambulancia también es fundamental para mejorar las posibilidades de supervivencia y recuperación».
En el análisis de la infraestructura de salud de la provincia de Misiones, Alejandro Guerrero Kampf destaca la notable inversión realizada en este ámbito, subrayando que estos datos no se tratan de un discurso político, sino de hechos tangibles. «Para que te hagas una idea, la fuerte inversión que hizo en Salud la provincia de Misiones y esto no es un discurso político, según las pautas de la OMS, un país del primer mundo debería contar con una ambulancia por cada 50.000 habitantes. Nosotros, Misiones y Posadas con 400.000 habitantes supera ampliamente esta norma, ya que cuenta con más de 150 ambulancias, lo que demuestra un compromiso sólido con la atención médica y la respuesta rápida en emergencias» dijo.
Guerrero Kampf también compara estas cifras con la Ciudad de Buenos Aires y resalta que, a pesar de tener una población significativamente mayor, el sistema de ambulancias de Misiones supera en número al de la capital. «Para que te hagas una idea, el SAME en la Ciudad de Buenos Aires, con 3 millones de personas durmiendo en la Ciudad de Buenos Aires y unos 7 millones de día, tiene 135 ambulancias», comparte.
Guerrero Kampf enfatiza la importancia de la responsabilidad al utilizar los servicios de emergencia, como el número gratuito 107. «El llamado responsable» es esencial para asegurarse de que los recursos estén disponibles para quienes realmente los necesitan. Guerrero Kampf advierte sobre las consecuencias de realizar llamadas falsas o innecesarias, ya que esto puede afectar la disponibilidad de ambulancias para emergencias genuinas en el futuro.
La muerte súbita puede afectar a personas de cualquier edad, sexo y estado físico, en cualquier momento y lugar. El 75-80% de los casos de muerte súbita se deben a una fibrilación ventricular y más del 70% se producen en el ámbito extrahospitalario, haciendo que la comunidad sea la primera encargada de atender un hecho de esta naturaleza.
La RCP permite mantener la oxigenación de los principales órganos, con compresiones torácicas, en situaciones donde la persona no tenga pulso, no respira o haya tenido un evento súbito de pérdida de conciencia y haya cesado la respiración y la circulación.
La mayoría de las eventualidades ocurren en lugares públicos, el trabajo o en el hogar. Con conocimientos en RCP y DEA, cualquier persona puede atender una emergencia en los primeros minutos y eso, muchas veces, puede salvar vidas. Así, en casos en que la situación de emergencia sea compleja, hay que realizar la reanimación cardiorrespiratoria o RCP, mediante compresiones torácicas y respiraciones de rescate para restablecer la circulación sanguínea hacia el cerebro y otros órganos vitales.
El DEA es un equipo que aplica una descarga de corriente al corazón para restablecer el ritmo cardíaco de una víctima de paro cardiorrespiratorio causado por fibrilación ventricular.
En general, la posibilidad de sobrevida de una persona que presenta paro cardíaco por fibrilación ventricular es del 5%. Con la utilización inmediata de un DEA sumado a las maniobras de Reanimación Cardiopulmonar Básica (RCP), este porcentaje sube hasta un 75% si se aplica antes de los tres minutos. Por cada minuto que pasa la posibilidad disminuye un 10%.
Para utilizar un DEA no es necesario ser personal de la salud, aunque es recomendable obtener estos conocimientos como forma de complementar un curso de RCP.
Además, es importante recordar que en Argentina se aprobó en 2015 la ley 27.159, de prevención integral de la muerte súbita, y en julio de 2022 se reglamentó. La ley establece que los lugares públicos y privados de acceso público con concentración o circulación superior a 1000 personas por día deberán contar con al menos DEA y personas entrenadas en RCP.
La reanimación cardiopulmonar (RCP) es una técnica para salvar vidas que es útil en muchas situaciones de emergencias, como un ataque cardíaco o un ahogamiento, en las que la respiración o los latidos del corazón de una persona se han detenido. La Asociación Americana del Corazón recomienda comenzar con RCP haciendo compresiones fuertes y rápidas en el pecho. Esta recomendación de RCP solo con las manos se aplica tanto a las personas sin capacitación como al personal de primeros auxilios.
Si tienes miedo de hacer RCP o no estás seguro de cómo hacer RCP correctamente, debes saber que siempre es mejor intentarlo que no hacer nada. La diferencia entre hacer algo y no hacer nada puede ser la vida de una persona.
RCP
Persona sin capacitación. Si no has recibido capacitación en RCP o no estás seguro de si puedes hacer respiraciones de rescate, solamente haz RCP con las manos. Esto significa hacer compresiones ininterrumpidas en el pecho, entre 100 y 120 por minuto, hasta que lleguen los paramédicos (se describe con más detalle a continuación). No es necesario que intentes hacer respiración de rescate.
Persona capacitada y lista para actuar. Si estás bien capacitado y tienes confianza en tus habilidades, comprueba si hay pulso y respiración. Si dentro de los 10 segundos no hay pulso ni respiración, comienza a hacer compresiones en el pecho. Comienza la reanimación cardiopulmonar con 30 compresiones en el pecho antes de hacer dos respiraciones de rescate.
Persona con capacitación pero que hace tiempo que no practica. Si has recibido capacitación en RCP en el pasado pero te sientes inseguro de tus habilidades, limítate a hacer entre 100 y 120 compresiones en el pecho por minuto (los detalles se dan a continuación).
Los consejos anteriores son válidos para situaciones en las que adultos, niños y bebés necesiten RCP, pero no para recién nacidos (bebés de hasta 4 semanas de edad).
La reanimación cardiopulmonar puede mantener la circulación de la sangre oxigenada hacia el cerebro y otros órganos hasta que un tratamiento médico de emergencia pueda restablecer el ritmo cardíaco normal. Cuando el corazón se detiene, el cuerpo ya no recibe sangre oxigenada. La falta de sangre oxigenada puede causar daño cerebral en solo unos minutos.
Si no has recibido capacitación y tienes acceso inmediato a un teléfono, antes de hacer RCP llama al 911 o a tu número local para emergencias. El operador te dará instrucciones sobre los procedimientos adecuados hasta que llegue la ayuda. Para aprender a hacer RCP correctamente, debes tomar un curso acreditado de primeros auxilios que incluya RCP y que enseñe cómo utilizar un desfibrilador externo automático.
Antes de comenzar la RCP, verifica lo siguiente:
¿La persona está en un entorno seguro?
¿La persona está consciente o inconsciente?
Si la persona parece inconsciente, tócale o golpéale el hombro y pregúntale en voz alta «¿Te encuentras bien?».
Si la persona no responde y estás con otra persona que puede ayudar, uno de ustedes llame al 911 o al número de emergencias local y traiga el DEA, si hay alguno disponible. La otra persona debe comenzar el RCP.
Si estás solo y tienes acceso inmediato a un teléfono, llama al 911 o al número local de emergencias antes de comenzar la RCP. Si tienes un DEA cerca, tráelo.
Tan pronto como tengas el DEA, proporciona una descarga si lo indica el dispositivo y, luego, comienza a hacer RCP.
Recuerda los tres pasos fundamentales (C-A-B)
La American Heart Association (Asociación Estadounidense del Corazón) utiliza las letras C-A-B para ayudar a las personas a recordar el orden en que se deben hacer los pasos para la RCP.
C: compresiones (en inglés «compressions»)
A: vía respiratoria (en inglés «airway»)
B: respiración (en inglés «breathing»)
Compresiones: restaurar el flujo sanguíneo
Las compresiones significan que usarás tus manos para presionar con fuerza y rápidamente de una manera específica sobre el pecho de la persona. Las compresiones son el paso más importante en la RCP. Sigue estos pasos para hacer compresiones de RCP:
Acuesta a la persona de espalda sobre una superficie firme.
Arrodíllate junto al cuello y los hombros de la persona.
Coloca la parte inferior de la palma (base) de tu mano sobre el centro del pecho de la persona, entre los pezones.
Coloca tu otra mano encima de la mano que está sobre el pecho. Mantén los codos estirados y coloca tus hombros directamente encima de tus manos.
Presiona hacia abajo el pecho (comprime) al menos 2 pulgadas (5 centímetros), pero no más de 2,4 pulgadas (6 centímetros). Usa todo el peso de tu cuerpo (no solo tus brazos) cuando hagas compresiones.
Presiona el pecho con firmeza a un ritmo de 100 a 120 compresiones por minuto. La Asociación Americana del Corazón sugiere hacer compresiones al ritmo de la canción «Stayin’ Alive». Deja que el pecho vuelva a su posición (retracción) después de cada compresión.
Si no estás capacitado en reanimación cardiopulmonar, continúa realizando compresiones en el pecho hasta que haya señales de movimiento o hasta que llegue el personal médico de emergencia. Si has recibido capacitación para hacer RCP, abre las vías respiratorias y proporciona respiración de rescate.
Vías respiratorias: abre las vías respiratorias
Si estás capacitado en RCP y has realizado 30 compresiones del pecho, abre las vías respiratorias de la persona mediante la maniobra de inclinarle la cabeza y levantarle el mentón. Coloca la palma de tu mano sobre la frente de la persona e inclínale suavemente la cabeza hacia atrás. Luego, con la otra mano, levántale suavemente el mentón hacia adelante para abrir las vías respiratorias.
Respiración: respira por la persona
La respiración de rescate puede ser boca a boca o boca a nariz, si la boca está gravemente lesionada o no se puede abrir. Las recomendaciones actuales sugieren hacer respiración de rescate usando un dispositivo con bolsa y mascarilla con un filtro de aire de alta eficiencia (HEPA).
Después de abrir las vías respiratorias (usando la maniobra de inclinarle la cabeza y levantarle el mentón), apriétale las fosas nasales para la respiración boca a boca y cubre la boca de la persona con la tuya, haciendo un sello.
Prepárate para dar dos respiraciones de rescate. Proporciona la primera respiración de rescate (de un segundo de duración) y observa si se eleva el pecho.
Si el pecho se eleva, proporciona la segunda respiración.
Si el pecho no se eleva, repite la maniobra de inclinarle la cabeza y levantarle el mentón y luego proporciona una segunda respiración. Treinta compresiones del pecho seguidas de dos respiraciones de rescate se consideran como un ciclo. Ten cuidado de no proporcionar demasiadas respiraciones o de respirar con demasiada fuerza.
Continúa con las compresiones del pecho para reiniciar el flujo sanguíneo.
Tan pronto como consigas un desfibrilador externo automático, aplícalo y sigue las instrucciones. Administra una descarga, luego reanuda las compresiones en el pecho durante dos minutos más antes de administrar una segunda descarga. Si no estás capacitado en el uso de un DEA, cualquier operador del 911 u otro operador médico de emergencia puede guiarte con instrucciones. Si no tienes a mano un DEA, ve al paso 5 a continuación.
Continúa haciendo RCP hasta que haya señales de movimiento o hasta que llegue el personal médico de emergencia.
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