Misiones | Hijo de exintendente a juicio acusado de asesinar a su madre y balear a su padre en el 2020

Pablo Schoenfisch (20) está imputado por el asesinato de su madre, Faustina Antúnez (56), y el intento de homicidio de su padre, el ex intendente de Santiago de Liniers. El Juez de Instrucción de Eldorado elevó el expediente a juicio.

El titular del Juzgado de Instrucción Uno de Eldorado, Roberto Saldaña, consideró cerrada la primera etapa del proceso y elevó el expediente a juicio. Ahora será el Tribunal Penal de aquella localidad quien deberá establecer una fecha para el inicio del debate.

Al momento del hecho, el acusado Pablo Schoenfisch tenía apenas 18 años, pero este próximo 31 de diciembre, cumplirá 21. El joven llega a juicio imputado por el delito de “homicidio agravado por el vínculo y homicidio en grado de tentativa agravado por el vínculo”. En el caso de ser hallado culpable, será condenado a prisión perpetua.

Según el auto de requerimiento de elevación a juicio al que tuvo acceso este medio, el pasado 14 de mayo del 2020, entre las 3:40 y las 4:30 horas, estimativamente, Pablo se encontraba en la casa de su abuela debido a que esa noche le tocaba cuidarla.

En ese rango horario, se dirigió caminando hasta su vivienda familiar que compartía con sus padres Arnoldo Schoenfisch y Faustina Antúnez de 59 y 56 años de edad respectivamente, situada en la intersección de la ruta Provincial N° 226 y la calle Manuel Belgrano, en el barrio Los Tungales del Kilómetro 36 de la localidad de Santiago de Liniers.

Con un par de guantes de lana con detalles de cuerina colocados en sus manos y portando un revólver calibre 38 marca Smith & Wesson, cargado con seis cartuchos, ingresó a la habitación de sus padres con el propósito de asesinarlos.

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Efectuó, a muy corta distancia, un disparo con el arma de fuego en proximidad a la sien izquierda de su madre e inmediatamente después disparó sobre la sien de su padre. Dejó sobre el piso el revólver utilizado y se dirigió nuevamente a la casa de su abuela, acostándose a dormir con la ropa puesta y colocando los guantes utilizados dentro de una especie de cajonera con tapa ubicada en la cabecera de su cama.

Faustina Antúnez murió al instante, en tanto que Arnoldo Schoenfisch, logró pedir auxilio, desde una ventana de su vivienda, a su hermano Alberto, quien se domiciliaba en las inmediaciones. “Por culpa de Pablito, Pablito hizo cagada”, dijo suspirando la víctima.

Practicada la autopsia en el cuerpo de Faustina Antúnez, se constató una herida contusa causada por proyectil de arma de fuego en zona parietal izquierda con orificio de entrada y salida a nivel de zona temporo occipital derecha, afectando el proyectil en su trayectoria el encéfalo, causando traumatismo de cráneo encefálico gravísimo penetrante, provocando brevísimo periodo agónico con posterior paro cardiorespiratorio y óbito con muerte inminente.

Mientras que Arnoldo Schoenfisch, al examen médico presentó lesión en sien derecha compatible con orificio de entrada y salida ubicado en la sien izquierda, con fractura de macizo facial causada por el proyectil del arma de fuego, estableciéndose a partir de la pericia oftalmológica realizada, que tales daños le causaron ceguera bilateral irreversible con esotropia media.

Cabe destacar además que, según familiares, el encartado tenía una mala relación con sus padres. Se mencionó que “Pablito”, “no quería hacer nada en la casa” y “vivía rompiendo el auto”.

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