Reflexión del Pastor Guillermo Decena: «El pecado de la hipocresía»

El Pastor Guillermo Decena expresó que "la hipocresía es cuando un individuo se comporta de forma contraria a los valores sostenidos por él mismo. Un hipócrita es alguien que esconde sus intenciones y su verdadera personalidad, veamos lo que dice la Palabra de Dios".

Según la Real Academia, es el fingimiento de cualidades o sentimientos contrarios a los que verdaderamente se tienen o experimentan. La hipocresía puede venir del deseo de esconder de los demás, motivos reales. Un hipócrita es alguien que esconde sus intenciones y su verdadera personalidad.

El Pastor Guillermo Decena explicó en este marco que Jesús advierte sobre este profundo pecado y lo explica de una manera magistral.

– La levadura de los fariseos y de Herodes.

“Y entendiéndolo Jesús, les dijo: ¿Qué discutís, porque no tenéis pan? ¿No entendéis ni comprendéis? ¿Aún tenéis endurecido vuestro corazón? ¿Teniendo ojos no veis, y teniendo oídos no oís? ¿Y no recordáis?” (Marcos 8:17-18).

El Señor les hizo una solemne advertencia a sus discípulos acerca de la levadura de los fariseos y de Herodes, que ellos interpretaron como una especie de reprensión por el hecho de que se habían olvidado de comprar pan.

Pero Jesús no estaba hablando ni de pan, ni de levadura, sino que, una vez más, usaba cuestiones de la vida cotidiana con el fin de ilustrar verdades espirituales de su Reino. Él veía la levadura como símbolo de algo negativo, y podemos considerar algunas de las razones para establecer este paralelismo:

La levadura es un hongo microscópico que, mediante fermentación, produce gas, haciendo que la masa se expanda y cambie su naturaleza, operando exactamente igual que el pecado en el hombre. Tanto la levadura como el pecado son fuerzas muy poderosas; ambas tienen una gran tendencia a incrementar gradualmente su influencia, y las dos actúan de forma invisible. El Señor se refirió a la levadura como las ideas o argumentos que pueden influir y cambiar las formas de pensar y de actuar, apartándonos de la fe sincera y pura en Cristo.

El apóstol Pablo hizo una exhortación similar a los Gálatas:

«Vosotros corríais bien; ¿quién os estorbó para no obedecer a la verdad? Esta persuasión no procede de aquel que os llama. Un poco de levadura leuda toda la masa» (Gálatas 5:7-9).

 

– La levadura de los fariseos

El Señor comenzó advirtiendo a sus discípulos acerca de la levadura de los fariseos:

“(…) comenzó a decir a sus discípulos, primeramente: Guardaos de la levadura de los fariseos, que es la hipocresía. Porque nada hay encubierto, que no haya de descubrirse; ni oculto, que no haya de saberse” (Lucas 12:1-2).

La advertencia describe claramente los pensamientos y la actitud hipócrita: piensa que no se le va a descubrir, pero Jesús asegura que pronto sale a luz y será avergonzado públicamente.

La vida de los fariseos consistía en aparentar lo que realmente no eran, y hacían grandes exhibiciones de religiosidad externa. Aparentaban obedecer a la Palabra de Dios, cuando en realidad la habían sustituido por mandamientos humanos que ellos mismos habían ideado para proteger sus propios intereses. La actitud de estos hombres tenía un efecto contaminante semejante al de la levadura, y con esta forma de entender la vida espiritual, ni ellos, ni los que les seguían, nunca llegarían a estar en una relación correcta con Dios:

«¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas! Porque cerráis el reino de los cielos delante de los hombres; pues ni entráis vosotros, ni dejáis entrar a los que están entrando” (Mateo23:13).

 

– La levadura de Herodes

Esta levadura consistía en la “mundanalidad” escondida bajo la capa de una religiosidad oportunista y superficial. Herodes vivía desenfrenadamente en un ambiente mundano. La levadura de los fariseos y la de Herodes tenían en común el hecho de que los dos usaban la religión para sus propios fines y no para servir ni honrar a Dios.

 

– Es un pecado peligroso.

No debemos perder nunca de vista que en la vida cristiana hay peligros, y el Señor estaba intentando ponernos en alerta sobre algunos de ellos.

Jesús exhortó a sus discípulos, tal vez, porque estaba viendo que estaban siendo «contagiados» por la actitud de los fariseos que esperaban ver alguna señal para creer en Él. Pero mucho más probablemente, porque la actitud de incredulidad y endurecimiento de los discípulos los hacía propensos a aceptar este tipo de malas influencias.

Pero esta exhortación era también para todos nosotros. Debemos estar siempre alertas contra la falsedad y la hipocresía en la vida cristiana, con el contentarnos en vivir de las apariencias, satisfechos con cumplir ciertas normas religiosas externas, y desatendiendo la vida interior en el Espíritu. Debemos cuidarnos de vivir mundanamente, pensando que, porque tengamos una religión, Dios ya tiene que estar satisfecho con nosotros. Debemos ser honestos y sin doblez.

 

– La hipocresía trae tinieblas.

Jesús les estaba advirtiendo a los discípulos acerca de peligros espirituales mientras cruzaban en barca el mar de Galilea, y ellos sólo pensaban en que no tenían nada más que un pan para todos. ¿Cómo podía ser posible que estuvieran preocupados por el pan después de que habían visto a Jesús multiplicar unos pocos panes para dar de comer a miles de personas?

Su verdadero problema era espiritual, y consistía en la falta de fe y de un gran mal que atenta contra la vida espiritual, la hipocresía. Es un buen ejemplo del cristiano enfocado en lo material, que no es capaz de entender la lección espiritual de Jesús.

“Así que, todo lo que os digan que guardéis, guardadlo y hacedlo; mas no hagáis conforme a sus obras, porque dicen, y no hacen” (Mateo 23:3).

Jesús describe a los hipócritas fariseos como aquellos que «dicen y no hacen” y en la parábola del mal siervo se describe el castigo de este siendo azotado.

“Vendrá el señor de aquel siervo en día que éste no espera, y a la hora que no sabe, y lo castigará duramente, y pondrá su parte con los hipócritas; allí será el lloro y el crujir de dientes” (Mateo 24:50-51).

Que Dios te bendiga, te guarde de todo mal y tengas una semana de completa victoria!

Pastor Guillermo Decena

Victory Church