La maquinaria agrícola era guiada por un adolescente en un campo de la localidad de Vilelas, población rural del departamento Juan Felipe Ibarra, a 150 kilómetros al sureste de la capital Santiago del Estero.
Auxiliado de urgencia por agricultores del lugar, el niño fue trasladado y falleció antes de ingresar al hospital zonal de Quimilí, como consecuencia de las múltiples heridas sufridas en la cabeza y el tórax.
Por disposición de la jueza de Instrucción en lo Criminal y Correccional de V Nominación, Rosa Falco de Rainieri, se ordenó que el cuerpo del menor sea trasladado y sometido a una autopsia en la Morgue Judicial que funciona en el Hospital Independencia de la ciudad de Santiago del Estero.