El seleccionado de Phelan cayó 28-13 ante los All Blacks como visitante y sigue sin poder ganar en el Rugby Championship.
Pese a jugar un buen partido, Los Pumas no pudieron una vez más con los All Blacks, que los vencieron 28-13 en un poblado Waikato Stadium de Hamilton que cobijó al encuentro correspondiente a la tercera fecha del Rugby Championship.
El conjunto que orienta Santiago Phelan, que al cabo del primer tiempo caía apenas por 15-10, se dio el gusto, al menos, de negarle el punto bonus a su rival, del mismo modo que lo había hecho en 2012 en Wellington. Ahora los argentinos viajarán rumbo a Perth, Australia, donde el próximo sábado visitarán a los Wallabies en su última labor fuera de casa en el torneo. Luego, volverán a la Argentina, donde recibirán a Nueva Zelanda en La Plata, el 28 de este mes, y a Australia, en Rosario, el 5 de octubre.
Pese a la derrota, hubo varios aspectos para destacar en el equipo albiceleste. El scrum volvió a ser el de otros tiempos, ese que hizo ser respetado al rugby argentino. Y la reorganización defensiva fue muy buena. Se recibieron dos tries jugando con un jugador menos y el tercero, tras un error en el que esta vez no hubo forma de reordenarse para parar a los Hombre de Negro.
Como ocurriera en Wellington en la temporada pasada, Los Pumas marcaron el primer try del partido a partir de une pelota recuperada. Al debutante Francis Saili se le cayó la ovalada hacia adelante, pero los albicelestes, bien concentrados, aprovecharon la ventaja y Juan Manuel Leguizamón logró zambullirse en el ingoal local a los 5 minutos.
Fue un inicio de partido contundente. Pero enseguida aparecieron las fallas de siempre. El line volvió a ser un martirio (se perdieron cuatro pelotas en la primera parte) y las faltas disciplinarias fueron moneda corriente.
Por eso Nueva Zelanda se puso a tiro con un penal de Dan Carter y si no pasó al frente fue porque el apertura no estuvo certero en sus lanzamientos a los postes y falló otros dos intentos, aunque desde posiciones alejadas.
Los All Blacks empezaron a manejar la pelota de a poco, pero sucumbieron frente a la gran presión de los jugadores argentinos en una cancha en la que se hizo difícil manejar la pelota por la lluvia que casi siempre aparece en este país.
Hasta que, sobre los 23, cuando Jerome Garces se cansó de tantas infracciones, Eusebio Guiñazú, al igual que en el partido ante los Springboks en Soweto, dejó la cancha por 10 minutos con tarjeta amarilla y en ese lapso los anfitriones marcaron la diferencia.
Enseguida Aaron Smith anotó su primer try en la bandera izquierda y tres minutos más tarde volvió a hacerlo, esta vez aprovechando un kick al fondo de Ben Smith que Martín Landajo no pudo capturar sobre el ingoal.
Un penal de Nicolás Sánchez dejó la diferencia en apenas cinco puntos, pero ya parecía que el tren había pasado y Los Pumas no se habían subido.
En el segundo tiempo, la lluvia complicó más el traslado de la pelota. Carter y Sánchez intercambiaron penales de entrada y la diferencia se mantuvo, pero sobre los 13 le taparon un kick a Landajo y de ahí nació la acción que terminó con Julian Savea quebrando el ingoal albiceleste por tercera vez en el encuentro.
No hubo mucho más. Los All Blacks fueron en busca del punto bonus, pero se toparon con una defensa que esta vez estuvo muy bien plantada, como en buena parte de la edición 2012 del torneo. No lograron el punto bonus los locales, pero se quedaron con el triunfo y ampliaron la paternidad sobre Los Pumas, aunque esta vez los argentinos volvieron a dejar una buena imagen.
