“Para que extranjeros y los propios argentinos inviertan en proyectos productivos, hay que salir del cepo”, afirmó el economista Gerardo Schwarz

Gerardo Alonso Schwarz, economista y jefe del Instituto de Estudios de la Realidad Argentina y Latinoamericana (IERAL), explicó las etapas del plan económico del Gobierno nacional. Subrayó la necesidad de eliminar el cepo cambiario para atraer inversiones y la importancia de la reintroducción del impuesto a las ganancias debido a que se trata de una medida coparticipable que beneficiará principalmente a las provincias del norte argentino.

En diálogo con Día Siete, Schwarz brindó su perspectiva sobre el plan económico del Gobierno nacional liderado por Javier Milei y su equipo. Destacó que el mismo se ejecuta en varias etapas, y no en un solo conjunto de medidas implementadas de inmediato.

La primera etapa se enfocó en la macroeconomía, pues abordó el control de la inflación, la disminución del déficit fiscal y la corrección de los desequilibrios en los precios internos, especialmente en las tarifas. “Esa era la primera etapa, que evidentemente ya está cumpliéndose o ya estaría cerca de cumplirse”, afirmó.

La segunda etapa, que incluye la Ley Bases, busca incentivar la radicación de inversiones. “Tiene una serie de incentivos a la radicación de inversiones, como por ejemplo el RIGI, y una serie de modificaciones estructurales que apuntan a toda la economía”, precisó. Sin embargo, resaltó la importancia de eliminar el cepo cambiario para atraer inversiones extranjeras y nacionales: “Para que los inversores extranjeros y los mismos argentinos confíen en la economía argentina e inviertan sus ahorros en proyectos productivos, hay que salir del cepo”.

Respecto al cambio de régimen monetario anunciado por el presidente Milei, Schwarz aclaró que “siempre se habló de una dolarización de la economía argentina”, aunque mencionó que hoy el gobierno apunta más bien a un sistema bimonetario o de competencia de monedas. Más allá de eso, recalcó que “todavía primero tenemos que salir del cepo” y consideró que la implementación de este nuevo sistema monetario no ocurrirá en el corto plazo.

Y completó: “Es algo que ya está sucediendo [encontrar bienes y servicios nacionales valuados en dólares] sobre todo en las ciudades más grandes. En Buenos Aires ustedes van a ver incluso alquileres de viviendas o de oficinas directamente en dólares o algunas cosas que se pactan en dólares, después se pagan en pesos o se pagan en dólares a determinado tipo de cambio. También está la discusión de cuál es el tipo de cambio. Por eso tenemos que salir del cepo para que haya un solo tipo de cambio para poder convalidar estas cuestiones o hacerlas un poco más claras”.

 

La vuelta del impuesto a las ganancias y su impacto en la coparticipación

Schwarz sostuvo que “el peor impuesto que existe es la inflación” que afecta a todo el país y principalmente a aquellos que menos ganan ya que el Estado se queda con el 21% de su ingreso –el cual destina íntegramente al consumo- a través del IVA. Mientras que quienes más tienen consumen la mitad de su salario y lo restante se destina a sus ahorros.

Sobre el impuesto a las ganancias, opinó que “en todos los países hay un impuesto al ingreso e idealmente ese impuesto a los ingresos es el más progresivo, es decir, el que más ingresos tiene, más paga”. En el caso de lo aprobado recientemente en la Ley Bases para la Argentina, el entrevistado detalló que, a partir de un ingreso bruto mensual de 1.800.000 pesos, se comenzará a pagar nuevamente este tributo. Ahora bien, “son valores bastante altos comparado con ingresos promedio o salarios promedio en cada una de nuestras provincias”, remarcó.

Aun así, el jefe del IERAL aclaró que primero debe publicarse en el Boletín Oficial para que empiece a regir. Se prevé que el lunes se complete dicha acción aunque según sus declaraciones “se esperaría un mes hasta la aplicación, porque todo esto implica reglamentaciones y hay que tener en cuenta la posibilidad de que sea apelado”, aunque esto último se trata de un trámite/reclamo de índole personal.

Por último, resaltó la importancia de que el impuesto a las ganancias sea coparticipable, porque beneficia tanto al Gobierno nacional como a las provincias mediante una distribución automática diaria.

“Es algo que todas las provincias lo van a agradecer, sobre todo las del norte argentino, dentro del cual obviamente está la nuestra, que han visto muy caídos sus ingresos y sobre todo que no tienen regalías petroleras o del gas como las provincias patagónicas”, concluyó.

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