En un operativo conjunto entre la Policía de Misiones y las fuerzas de seguridad brasileñas, dos delincuentes fueron detenidos y otros dos abatidos luego de un violento asalto en la localidad de Bernardo de Irigoyen, ocurrido el pasado viernes. Los cuatro individuos, de nacionalidad brasileña y con antecedentes por robos calificados, protagonizaron un enfrentamiento armado en Brasil tras huir de la escena del crimen.
El asalto ocurrió alrededor de las 10 de la mañana en un local comercial de Bernardo de Irigoyen, donde una familia fue sorprendida por al menos dos delincuentes que hablaban en portugués. La familia, compuesta por un hombre de 43 años, su esposa y sus dos hijos (un adolescente de 16 años y una joven de 23), fue maniatada y encerrada en el baño. Los asaltantes robaron un automóvil marca Kia, dinero y varios celulares.
De inmediato, los agentes de la comisaría de Bernardo de Irigoyen coordinaron con la Brigada de Frontera para contactar a las autoridades brasileñas. Se implementó un operativo cerrojo en la zona limítrofe, con la colaboración de la Policía Militar de Santo Antonio Do Sudoeste Paraná, Grupos Especiales BOFron, Rotam, Brigada Militar de ese estado y la Policía Militar de Dionisio Cerqueira.
El automóvil robado, con cuatro ocupantes, fue ubicado en la ciudad de Marmeleiro. Se inició una persecución que culminó en Renasceça, donde los delincuentes chocaron con un surtidor de combustible y huyeron a pie. En este momento, Ariel Santiago y Leandro Arthur Avila Tuski fueron detenidos, mientras que otros dos se internaron en el monte.
Hacia las 18 horas, tras una intensa búsqueda con helicóptero y perros, los agentes de la Rotam BR localizaron a los dos prófugos. Durante el enfrentamiento armado, Eduardo Polazzo y Gabriel Cardoso De Olivera fueron abatidos. Ambos eran buscados por múltiples delitos, incluyendo asesinatos y tráfico de estupefacientes en Brasil.
Las investigaciones revelaron que Polazzo y De Olivera estaban implicados en el asesinato del abogado Fabio Bariviera (46), cuyo cuerpo fue hallado en marzo pasado en una plantación en la zona de Capanema, Paraná. Bariviera había sido decapitado, y las autoridades trabajaron incansablemente para esclarecer este brutal crimen, logrando identificar y detener a varios sospechosos, entre ellos los mencionados delincuentes.
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