Casi cien empresarios que respondieron a la encuesta anual de Visión Misionera dejaron un balance positivo del año que termina y proyecciones moderadamente optimistas de cara a 2024 a pesar del horizonte de incertidumbre que plantean la economía y la política nacionales. Un tercio de los consultados planea tomar nuevos empleados y dos tercios proyectan alguna inversión.
Misiones Online volvió a consultar a los empresarios más destacados de todas las actividades económicas para dar forma a la edición 2024 del anuario Visión Misionera. Prácticamente todos respondieron y el resultado fue una muestra muy amplia, en la que están representadas todas las actividades y los 78 municipios.
En los testimonios de los empresarios conviven un espíritu de cauto optimismo para el mediano plazo con la certeza de que los próximos meses serán difíciles prácticamente para todos los rubros. “Pasar la primera parte del año”, es la consigna de la hora.
Los problemas más mencionados fueron la inflación, la presión impositiva, la burocracia, los altos costos laborales y la ausencia de opciones de financiamiento a tasas razonables.
Entre los temas que generan inquietud hubo varias menciones para la posible reversión del flujo del comercio de frontera. Durante los últimos años fueron los paraguayos y los brasileños los que se acercaron a comprar en Misiones atraídos por la brecha cambiaria, pero de la mano de la reducción de esa brecha también se redujo la cantidad de compradores extranjeros en los comercios de toda la provincia y si avanza el atraso cambiario, podrían ser los misioneros los que vuelvan a comprar en los países vecinos.
“Tendremos que estar atentos al comercio de frontera, sobre todo con Paraguay que tiene costos fijos muy por debajo de los nuestros. El Ahora Misiones será fundamental mantenerlo para retener compradores aquí”, consideró Alberto Lindheimer, de Industrias Lindheimer.
El tema cambiario también preocupa a los exportadores. “Bajos precios internacionales de nuestros productos y altos impuestos a la exportación y los insumos importados, con probabilidad de apreciación del peso”, resumió de manera apretada el consultor forestal Gustavo Cetrángolo de Agroforestal Oberá.
La pérdida de poder adquisitivo del salario es otro de los problemas que mencionaron varios empresarios. El comercio teme una reducción significativa de la demanda por esa causa. En este punto, casi todos los que mencionaron el tema coinciden en la necesidad de sostener los programas Ahora Misiones que vienen sosteniendo el consumo en tiempos de crisis.
Martín Hreñuk, de Rosamonte SA agregó un factor que ningún otro mencionó en sus respuestas pero que resulta determinante para las agroindustrias: el clima. El empresario yerbatero destacó que después de cuatro años de sequía, la vuelta de las lluvias abrió un panorama alentador para la producción
A pesar de la incertidumbre reinante, los empresarios hicieron un balance muy positivo del año que termina y esperan con moderado optimismo al año que inicia.
Tan es así que ante la pregunta “¿cómo considera que le fue a su empresa durante 2023?” 7,5% de los consultados eligió la opción “excelente”, 28% seleccionó la opción “muy bien” y 37,6% “bien”.
Las opciones positivas acapararon más del 70% de las respuestas, 17% se inclinó por la opción “regular” y solo un 8,6% de los encuestados dijo que le fue mal.
A la hora de proyectar el año que inicia, 54% de los consultados estimó que le irá mejor que en 2023, otro 23,7% espera tener un desempeño similar y menos de 8,6% cree que le irá peor.
En coincidencia con esa proyección optimista, 66% planea hacer nuevas inversiones y 35% tiene previsto tomar nuevo personal en algún momento del año próximo.
