Diagnóstico de la crisis según el bloque justicialista

La crisis por las que están atravesando diferentes provincias con sus economías regionales como ser la producción lanera en el Sur, la producción láctea en el centro Norte, la producción fructícola en el Oeste y la algodonera en el Chaco, son sólo algunos ejemplos tomados al azar de los muchos que de diferente manera fueron afectados por problemas comunes que, al igual que el sector hierbatero, tienen sus orígenes en profundos cambios que ocurrieron en el campo económico social y tecnológico, fenómeno denominado globalización. Este fenómeno actúa negativamente cuando encuentra un mercado recientemente desregulado e ineficiente por obsolescencia y desventajas comparativas. En particular la crisis yerbatera se centra en una sobreoferta agravada por la desregulación del control de las plantaciones y una caída en el consumo que alcanza el 6 %. La suma de diferentes factores es lo que hoy nos encuentra inmersos en una profunda crisis yerbatera que a nuestro entender es coyuntural y exige medidas urgentes y a largo plazo. Para ello es necesario un conocimiento adecuado de la situación y sus protagonistas. Los diferentes actores entre los que se encuentran los productores, recolectores (tareferos), transportistas, técnicos y profesionales del sector, cooperativas, elaboradores (secaderos canchadores), molineros, envasadores y toda la cadena de comercialización. Este complejo mecanismo de producción y comercialización se ve afectado en diferentes puntos por un sin número de problemas que impactan en diferente grado y en primer lugar a la sobreoferta del producto que, como lógica consecuencia en un mercado desregulado, provoca la caída de los precios. (Este escenario es propicio para la aparción de comerciantes inescrupulosos que evaden los controles fiscales). – La falta de controles de la comercialización agravada por la falta de presupuestos de los organismos fiscalizadores. – Incremento de las presiones fiscales y tributarias que afectan significativamente los costos de producción y elaboración. – Aparición de hipermercados muy poderosos que imponen reglas de comercialización y envasado. En este marco apoyamos una serie de medidas que deberán implementarse en forma conjunta entre los sectores vinculados e impulsados por la decisión política del gobernador de continuar con el diálogo constructivo y la negociación permanente para superar la crisis, ya que ella no depende de una decisión unipersonal. Entre las acciones a tomar consideramos que se debería modificar el código alimentario a fin de disminuir el porcentaje de palos permitidos en el producto final. Efectivizar los controles fiscales de comercialización y transporte e intensificarlos en los límites provinciales a fin de poder establecer datos estadísticos reales y confiables, además de eliminar la presencia de marcas no autorizadas o apócrifas. Establecer un aforo a la comercialización de yerba cancha fuera de los límites provinciales tal como se hace con la madera. Plena vigencia de la ley 24452 «de disposición dominante» que regule la actividad de los hipermercados no permitiendo la venta por debajo de precios de costo. Control del envasado en origen mediante un estampillado o código de barras. Actuaciones en política tributaria para permitir una rebaja del IVA y una activa política crediciticia para el sector cooperativa a fin de sanear sus pasivos donde el estado podría financiar uno do dos puntos de la tasa de crédito. Reclamar para el sector un precio diferencial en el gas oíl. Reducción en las tarifas del peaje para el transporte, tanto para el producto primario como la yerba elaborada. Acompañar al señor Gobernador a efectos de gestionar subsidios para el pequeño y mediano productor a fin de retener el producto en planta sin cosechar y sustituir la mano de obra vacante de los tareferos y los hierbateros minifundistas mediante planes trabajar. Solicitar a la Nación la inmediata reposición delos fondos correspondientes al último presupuesto del INACIN (Instituto Nacional Cooperativo) a efectos de asistir al sector cooperativo. Establecer un fondo especial de la yerba mate para la creación de un Instituto Nacional de la Yerba Mate. Control intensivo sobre la situación laboral de los tareferos y todo el personal relacionado con la cosecha y elaboración. A través de la Dirección de Trabajo de la Provincia de Misiones. Sostener la Mesa Yerbatera como política de concertación como elemento de diálogo a través del tiempo y como punto de partida de la diversificación y reconversión de los yerbales de baja producción, medidas tales como: – Forestación. – Ganadería Abastecimiento del Frigorífico COFRA. – Horticultura. – Fruticultura Citricultura Abastecimiento del packing de Alem. – Piscicultura. – Reconversión a Producción Orgánica. Poner a disposición del sector productivo la infraestructura provincial a fin de movilizar a los diversos organismos relacionados a la producción primaria Ministerio del Agro y la Producción, Ministerio de Ecología, Dirección de Industria, IFAI y demás organismos a fin de lograr una rápida reactivación y reconversión del sector productivo, mediante un coordinado plan de extensión de asistencia técnica. Contar con registros reales de superficies y productores para planificar medidas concretas de manejo de la oferta. Reinscripción de industrias y secaderos para contar con registros actuales de producción. Al sector productivo y elaborador, reiteramos nuestro apoyo desde la legislatura provincial acompañando con las leyes que se necesiten a fin de encontrar un camino que aporte soluciones concretas a la crisis del sector.