El sistema de riesgos del trabajo enfrenta una crisis inédita: se proyectan más de 132.000 juicios en 2025, a pesar de la baja en los accidentes laborales. Desde UART advierten sobre el impacto en la productividad, el empleo y la sostenibilidad del sistema.
El Sistema de Riesgos del Trabajo en Argentina atraviesa un momento crítico. De acuerdo con las estadísticas dadas a conocer por la Unión de Aseguradoras de Riesgos del Trabajo (UART) en un comunicado, en el primer trimestre del año ya se registraron 25.621 nuevos juicios por accidentes laborales. De mantenerse la tendencia, el año cerraría con una cifra sin precedentes: 132.100 nuevos litigios. Esta situación pone al borde del colapso a un sistema que brinda cobertura a más de 10 millones de trabajadores en todo el país.
La presidenta de la UART, Mara Bettiol, fue contundente al advertir que “el sistema está en riesgo producto del exacerbado crecimiento de la litigiosidad y un esquema de actualización de los montos de indemnizaciones que no responde a la normativa vigente”.
Solo en marzo se notificaron 11.546 nuevos juicios, lo que demuestra que el ritmo de litigios no solo no se detiene, sino que continúa en ascenso. En los últimos doce meses, el promedio mensual supera las 10.000 demandas, y el salto respecto de años anteriores es significativo: en 2018 se habían registrado menos de 80.000 juicios, lo que implica un incremento cercano al 70%.
Contradicción: menos accidentes, más juicios
El crecimiento de la litigiosidad contrasta fuertemente con otro dato del mismo informe: la disminución sostenida en la cantidad de accidentes laborales. Desde la creación del sistema en 1996, la siniestralidad se redujo más de la mitad, pasando de 70,9 a 31,8 accidentes por cada mil trabajadores cubiertos (sin contar los accidentes in itinere).
Para Bettiol, esta contradicción genera un fuerte impacto sobre la economía y el empleo. “El crecimiento de los juicios tiene un impacto indudable no sólo sobre el sistema sino también en la competitividad, el crecimiento y en la generación de empleo de nuestro país”, destacó.
Además, enfatizó la importancia de adoptar medidas urgentes: “Es imperioso corregir los costos derivados de esta litigiosidad para evitar un impacto mayor sobre un sistema que brinda anualmente 14 millones de prestaciones asistenciales y que, desde su creación, ha salvado más de 19.000 vidas”.
Demoras judiciales
Uno de los factores señalados por UART como causa del aumento de demandas es el incumplimiento por parte de los poderes judiciales provinciales en la creación de los Cuerpos Médicos Forenses, tal como lo establece la Ley de Riesgos del Trabajo reformada en 2017. Esta legislación buscaba precisamente ordenar el sistema indemnizatorio y frenar la judicialización, estableciendo parámetros claros y uniformes.
“La inacción de los poderes judiciales provinciales en la creación de los Cuerpos Médicos Forenses, que las propias legislaturas aprobaron, vuelve a multiplicar el número de juicios”, advirtió Bettiol. Y agregó: “Es imperioso que se fijen mecanismos de actualización razonables. Las consecuencias de la inacción serían catastróficas en la estructura productiva argentina”.
El informe también revela cómo se distribuye la litigiosidad por distrito. La Provincia de Buenos Aires lidera el ranking con el 40% de los juicios, seguida por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) con el 19%. Luego se ubican Santa Fe, Mendoza y Córdoba. Este mapa refleja la necesidad de una respuesta federal y coordinada para abordar la crisis.
Desde UART destacan que la situación actual recuerda al escenario de 2017, cuando se alcanzó un pico de 130.700 juicios. En ese momento, la presión sobre el sistema fue tal que se implementó una reforma legal de urgencia. Sin embargo, la falta de implementación plena de aquella normativa permitió que los problemas resurjan, esta vez con mayor intensidad, señala la entidad en su comunicado.
