Femicidio de Soledad Machuca: un testigo clave reveló detalles que contradicen la versión del acusado

En el marco de la investigación por la muerte de Soledad Machuca, un enfermero que intervino la noche del hecho brindó un testimonio que podría ser determinante en la causa. En su declaración ante la Justicia, aseguró que la temperatura del cuerpo de la víctima no coincidía con la de una persona fallecida por un infarto, como en un principio se había informado.

El trabajador de la salud, integrante de la Red de Traslados, llegó al domicilio de Machuca el pasado 25 de febrero tras recibir un alerta que indicaba un supuesto cuadro de descompensación. Sin embargo, al examinar el cuerpo, notó que se encontraba frío, algo que le resultó llamativo dada su experiencia en casos de infarto. 

muerte de su pareja en Posadas
Femicidio de Soledad Machuca: la víctima era preceptora en Posadas

Habitualmente, las personas que sufren un paro cardíaco suelen mantener el calor corporal durante un tiempo considerable. En este caso, el frío del cuerpo no se correspondía con la información que recibieron..

Además, reveló que el imputado, pareja de la víctima y principal sospechoso, habría intentado realizar maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP), manipulando el cuerpo antes de la llegada de los peritos. También detalló que Soledad tenía el cabello suelto y las uñas en un estado normal, información que podría ser clave en la reconstrucción de los hechos.

Un caso que apunta a femicidio

La investigación por la muerte de la docente de 35 años dio un giro cuando los peritajes descartaron la hipótesis inicial y revelaron signos de violencia previos al deceso. La autopsia determinó que la causa de la muerte fue asfixia por comprensión cervical, lo que motivó al juez de Instrucción N°3, Fernando Verón, a reclasificar el caso como femicidio y ordenar la detención de su pareja, un suboficial de la Policía de Misiones de 37 años.

El acusado declaró que Soledad se desvaneció repentinamente y que, en la caída, golpeó su cabeza. Argumentó que durante un viaje reciente a Brasil, la víctima habría contraído un virus que le causó malestares en los días previos. No obstante, las pericias pusieron en duda su versión y se hallaron pruebas que podrían indicar una premeditación del crimen.

Pruebas que complican al imputado

Entre los elementos incorporados a la causa, se destacan pericias realizadas en el teléfono del sospechoso. En los días previos al hecho, el suboficial buscó en internet información sobre desmayos por deshidratación y las penas previstas para el femicidio. Además, se registró una comunicación con un comisario en un horario cercano al de la muerte de la víctima.

Otro dato que reforzó la teoría de un ataque es que la escena del crimen habría sido alterada. Se encontraron rastros de sangre que habrían sido limpiados, y la madre del acusado le habría dicho a un testigo: «Yo ya limpié la sangre que había al lado del cuerpo».

La fiscalía y la querella insistieron en que las lesiones en los brazos y el estómago de la víctima no serían compatibles con un intento de RCP, sino con una agresión física previa. «Tuvimos que informarle a la familia que, más allá del ahorcamiento, hay signos de una golpiza», afirmó Nancy Jara, abogada de la querella.

Pedido de prisión preventiva

Ante la contundencia de las pruebas, la querella solicitó la prisión preventiva del imputado, argumentando que su libertad podría entorpecer la investigación. «Confiamos en el accionar del juez Verón. Creemos que hay elementos suficientes para que continúe detenido», sostuvo Jara.

El caso de Soledad Machuca se suma a la preocupante estadística de femicidios en Argentina y refuerza el reclamo de justicia por las víctimas de violencia de género. «El cuerpo de Sol habló y no podemos ignorarlo», concluyó la abogada.

 

Femicidio de Soledad Machuca

LA REGION

NACIONALES

INTERNACIONALES

ULTIMAS NOTICIAS

Newsletter

Columnas