Seis detenidos escaparon esta madrugada de la Comisaría 3A, ubicada en Lavalle al 2600, en el barrio de Balvanera. La fuga se produjo alrededor de las 4 de la mañana y encendió nuevamente las alarmas en el ámbito de la seguridad porteña.
Los presos que se dieron a la fuga fueron identificados como los argentinos Matías Álvarez, Daniel Olivera y Leonardo Emanuel Zavala, además de los chilenos Rojas Solís, Díaz Contreras y Martín Alfredo Maldonado Villalobo. Según fuentes policiales, la Policía de la Ciudad se encuentra analizando las cámaras de seguridad del Centro de Monitoreo para reconstruir el recorrido de los evadidos, quienes fueron vistos corriendo por la zona de Viamonte y Larrea.
Este episodio se suma a otros dos ocurridos en lo que va del año. La semana pasada, seis presos escaparon de la Alcaidía 6A de Caballito, y el domingo pasado, otro detenido se fugó de la dependencia 1D, en el barrio de Retiro. Además, en abril de 2024, dos detenidos lograron evadirse de la misma Comisaría 3A.
La reiteración de fugas en la Ciudad de Buenos Aires generó un fuerte debate sobre la capacidad de alojamiento en las comisarías y alcaidías porteñas. En este contexto, el ministro de Seguridad de la Ciudad, Waldo Wolff, deberá presentarse hoy en la Legislatura para brindar explicaciones sobre la situación ante los diputados de la Comisión de Seguridad. La convocatoria fue impulsada por legisladores de La Libertad Avanza, alineados con Karina Milei, y de Unión por la Patria, sector referenciado en Juan Manuel Olmos.
El problema de la sobrepoblación carcelaria se arrastra desde 2020, cuando el gobierno nacional de turno restringió los traslados de presos a penales federales. En ese entonces, los detenidos en la Ciudad eran aproximadamente 60, mientras que en la actualidad la cifra supera los 2.200. Si bien el Servicio Penitenciario Federal traslada a unos 90 presos por semana, la situación sigue siendo crítica.
Fuentes del ámbito de la seguridad indicaron que más del 90% de los detenidos en dependencias porteñas deberían estar alojados en penales federales. Actualmente, las 41 alcaidías y 37 comisarías de la Ciudad se encuentran colapsadas, lo que obligó a la implementación de medidas transitorias, como la instalación de cuatro alcaidías modulares en Villa Soldati, Chacarita, Barracas y Saavedra, con capacidad para 80 detenidos cada una.
La seguidilla de fugas también provocó tensiones entre el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, y la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich. Desde la Ciudad sostienen que la crisis se debe a la falta de cupo en las cárceles federales, mientras que desde la Nación exigen mayores controles en las comisarías y alcaidías.
En enero, la Ciudad removió a la cúpula de Seguridad porteña luego de una serie de evasiones en diferentes dependencias. Entre ellas, la de la Alcaidía 9 de Liniers, donde se escaparon 17 presos, y la de la Alcaidía 4 Bis, en Barracas, de donde huyeron 11 detenidos.
La problemática sigue sin resolverse y las fugas continúan. La presentación de Wolff en la Legislatura podría arrojar nuevas definiciones sobre los próximos pasos que tomará el gobierno porteño para evitar más evasiones en el futuro.
Fuga de presos en Caballito: maniataron al jefe de Alcaidía, dos fueron recapturados https://t.co/xjTUD9H1U4
— misionesonline.net (@misionesonline) February 10, 2025