El Papa Francisco revoluciona la Iglesia con la designación de mujeres en altos cargos clave de poder

El Papa Francisco sigue marcando hitos históricos en la Iglesia Católica al incrementar significativamente la presencia de mujeres en puestos clave de liderazgo en el Vaticano, una institución históricamente dominada por hombres. Este 2025 quedará en los anales de la Iglesia no solo por el Jubileo de la Esperanza, sino también por la llegada inédita de mujeres a posiciones de poder dentro de la curia romana.

El 7 de enero, Francisco designó a la religiosa italiana Simona Brambilla como «prefecto» del Dicasterio para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica. Es la primera vez que una mujer ocupa esta posición, desde la cual tendrá bajo su supervisión a más de medio millón de mujeres religiosas y a 128.559 sacerdotes de órdenes religiosas. Pero esto no fue todo. La semana pasada, el Papa anunció que, a partir de marzo, la monja franciscana Raffaella Petrini asumirá como «gobernadora» del Estado de la Ciudad del Vaticano, reemplazando al cardenal español Fernando Vérgez Alzaga.

Petrini, nacida en Roma en 1969, es licenciada en Ciencias Políticas por la Universidad Luiss y doctora en Teología por la Pontificia Universidad de Santo Tomás de Aquino, donde también enseña. Desde 2021, era la número dos del Governatorato y ahora se convertirá en la mujer más influyente del Vaticano, supervisando cerca de 2,000 empleados y las operaciones diarias del pequeño Estado.

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Brambilla se convirtió en la primera mujer en dirigir una institución en el Vaticano (Foto: La Nación).

 

Una apertura histórica impulsada por «Praedicate Evangelium»

Estos nombramientos son parte de un proceso iniciado por el Papa en mayo de 2022 con la promulgación de la constitución apostólica Praedicate Evangelium. Este documento separó el poder del gobierno de la ordenación sacerdotal, permitiendo que laicos y mujeres pudieran dirigir dicasterios, cargos anteriormente reservados a cardenales y arzobispos.

La presencia femenina en la curia no es nueva, pero ha cobrado fuerza bajo el pontificado de Francisco. En 2016, nombró a Barbara Jatta como directora de los Museos Vaticanos y a Paloma García Ovejero como vicedirectora de la Sala de Prensa. Desde entonces, la lista de mujeres en puestos estratégicos no ha dejado de crecer: Alessandra Smerilli, Emilce Cuda, Nathalie Becquart, y ahora Brambilla y Petrini, son solo algunos ejemplos.

Francisco ha insistido en la importancia de superar el clericalismo y dar mayor protagonismo a las mujeres. Durante una entrevista reciente, subrayó: «El trabajo de las mujeres en la curia ha avanzado lentamente, pero se ha comprendido bien. Saben gestionar mejor que nosotros».

Aunque estos avances han sido recibidos con entusiasmo, la socióloga argentina María Lía Zervino, miembro del Dicasterio del Clero, advierte que aún queda camino por recorrer para eliminar el clericalismo en toda la Iglesia. Sin embargo, destacó que lo logrado por Francisco supera todas sus expectativas y marcó un cambio significativo en la gobernanza eclesial.

 

Un ejemplo para la Iglesia global

Con estos nombramientos, el Papa ha sentado un precedente que podría inspirar a diócesis de todo el mundo a replicar este modelo más inclusivo y sinodal. Si bien aún queda mucho por hacer, la apertura de espacios de liderazgo para las mujeres en el Vaticano es un paso firme hacia una Iglesia más representativa y equitativa.

 

FUENTE: La Nación.

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