Reflexión del Apóstol Guillermo Decena: “Predicando a tiempo y fuera de tiempo”

El Apóstol Guillermo Decena expresó que "Dios a pesar de nuestras fallas y errores nos ama, llamando a perfeccionarnos y a evangelizar para que todo el mundo pueda conocerlo y disfrutar de su amor y bendiciones. Y lo más maravilloso es que Dios sigue siendo fiel a pesar de cualquier error, Él jamás nos fallará".

«Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, que juzgará a los vivos y a los muertos en su manifestación y en su reino, que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina» (2 Timoteo 4:1-2).

Tenemos aquí la segunda carta del apóstol Pablo a Timoteo, es la última epístola que escribe el apóstol y cualquiera entiende que al ser las últimas palabras que estaba escribiendo en su vida, serían palabras importantes.

Si nosotros tuviéramos que hacer una última carta ¿a quién estaría dirigida? Sería dirigida a alguien importante y sería algo de todo corazón y muy trascendente.

El Apóstol Guillermo Decena expresó en este marco lo siguiente «el apóstol Pablo escribió a Timoteo cosas importantes y póstumas, por ser su amado hijo espiritual, quien debía predicar en todo tiempo y en toda ocasión».

1. DIOS ABRIRÁ EL CORAZÓN DE MUCHA GENTE.

Cuando habla de “instes a tiempo” habla de momentos que van a ser muchísimo más fáciles. Habrá tiempos que van a ser más sencillos, que tendremos la bendición de Dios y las personas con total apertura acatarán el consejo, abriendo su corazón. Esto se ve desde el comienzo, en Pentecostés, cuando con una simple predicación se convirtieron tres mil personas. (Hechos 2:41).

Parece que hay tiempos en los que todo parece venir “a pedir de boca”, todo fluye con victoria y nuestra fe está en niveles altísimos.

Pero volvamos al apóstol Pablo, quién fue un excelente ejemplo de evangelizador incansable en buen y en mal tiempo, cuando tenía oportunidad y cuando no la tenía tan fácil. (Hechos 16:14) Hay registros gloriosos como este, cuando el Espíritu de Dios se movía con gran poder abriendo los corazones. Pablo fundó muchas iglesias, recorriendo los territorios. Pero es bueno entender que también vendrán tiempos que no serán tan propicios para la predicación del Evangelio.

 

2. PREDICANDO EN TIEMPOS COMPLICADOS Y DE PRUEBAS.

Entonces vinieron unos judíos de Antioquía y de Iconio, que persuadieron a la multitud, y habiendo apedreado a Pablo, le arrastraron fuera de la ciudad, pensando que estaba muerto. Pero rodeándole los discípulos, se levantó y entró en la ciudad; y al día siguiente salió con Bernabé para Derbe. (Hechos 14:19-20)

Parecía que no era el tiempo oportuno para predicar y que ya la presencia de Dios no estaba con Pablo. Pero esto no amedrentó su corazón, porque estaba dispuesto a predicar a tiempo y fuera de tiempo. Por esto dice que ¡volvió a la ciudad! A pesar de que su vida corría peligro.

Dios tiene planes celestiales para cada uno de nosotros y también hay momentos de prueba para nuestra fe. Eventualmente en nuestra vida cristiana esas pruebas, ese desierto, va a llegar. Cuando vienen estas situaciones recuerda que Dios está interesado en tu corazón. Él está buscando que nosotros seamos perfeccionados y muchas veces vamos a ser moldeados por el Señor a causa de pruebas difíciles, a través del fuego y de los golpes.

Muchas veces nos estamos preparando para la vida cristiana y llega el punto en que minimizamos las pruebas: “No me pasa nada, Dios está conmigo” y pensamos que todo está bien pero el apóstol Pablo dice: “Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza. Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo” (Efesios 6:10-11).

 

3. PREDICANDO EN TODO TIEMPO, PUES NO NOS DEJARÁ HUÉRFANOS.

La predicación en la historia ha sido regada por la sangre de los mártires. Es por esto que a pesar de toda lucha, el Evangelio debe ser predicado cualquiera sea la circunstancia que atravesemos.

«Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad. Todo lo puedo en Cristo que me fortalece» (Filipenses 4:12-13).

Pablo estaba dando consejos a Timoteo para el ministerio, para su vida. Muy seguramente Pablo estaba escribiendo esta carta dándole su corazón a Timoteo, sin pensar que sería preservada por miles de años y que hasta la fecha la pudiéramos leer.

Por tanto, todo lo soporto por amor de los escogidos, para que ellos también obtengan la salvación que es en Cristo Jesús con gloria eterna. Palabra fiel es esta: Si somos muertos con él, también viviremos con él; Si sufrimos, también reinaremos con él; Si le negáremos, él también nos negará. Si fuéremos infieles, él permanece fiel; El no puede negarse a sí mismo” (2 Timoteo 2:10-13).

Dios a pesar de nuestras fallas y errores nos sigue amando, llamando a perfeccionarnos y a evangelizar, y lo más maravilloso es que sigue siendo fiel a pesar de cualquier error. Es por este amor a los perdidos que Dios usa a algunas personas con fallas, que obviamente no irán muy lejos, pero Dios en su misericordia de alguna manera les usa para salvar a los perdidos porque no habrá otros que estén predicando.

Tenemos que aprender la lección cuando estamos en tiempo de dificultad, cuando estamos pasando por ese tiempo de luchas. Algunas personas nos van a fallar, pero Dios nunca lo hará. Dios está dispuesto a ver nuestra debilidad y ayudarnos a levantarnos.

Una persona que confía en el Señor y depende de Dios a lo largo de su vida puede tropezar y caer una y otra vez, pero no se quedará abajo. Superará los obstáculos y desafíos por la gracia y la fuerza de Dios, sacudiéndose el polvo y levantándose de nuevo. La resistencia es una de las bendiciones de quienes eligen vivir correctamente, a cualquier precio.

Que Dios te bendiga, te guarde de todo mal y tengas un 2025 lleno de victoria!

Apóstol Guillermo Decena

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