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El comercio de Puerto Iguazú enfrentó un 2024 caracterizado por la incertidumbre económica y la baja del consumo, según Rodrigo Blanco, presidente de la Cámara de Comercio local. A pesar de las dificultades, el sector mantiene expectativas positivas para el próximo año, con un enfoque en diferenciarse por la calidad del servicio.
Un año de cambios y resiliencia
Blanco describió 2024 como un año atípico, con cambios políticos y económicos que impactaron en la dinámica comercial. Destacó la capacidad de adaptación de los empresarios argentinos: «La resiliencia del comerciante y emprendedor argentino es notable. Mientras otros países ven devaluaciones como catástrofes, aquí aprendimos a manejarlas como parte de nuestra realidad».
El comienzo del año estuvo marcado por incertidumbre y volatilidad inflacionaria, lo que dificultó la planificación y afectó directamente al consumo. Sin embargo, hacia mediados de año se observó cierta estabilidad, lo que permitió a los comerciantes proyectar a corto plazo: «Aunque la inflación sigue alta, contar con certidumbre nos da un margen para planificar hasta julio del próximo año», comentó Blanco.
Impacto en el consumo y desafíos locales
El consumo en Puerto Iguazú sufrió una caída significativa, especialmente entre el público extranjero, como brasileros y paraguayos, quienes anteriormente representaban un porcentaje importante de las ventas. Blanco explicó que la paridad cambiaria redujo la afluencia de compradores internacionales: «El público que arrasaba con todo el año pasado, ya no está. Esto nos obliga a replantear nuestras estrategias».
El desafío para 2025, según Blanco, será diferenciarse por servicios y atención al cliente, buscando atraer tanto al turista nacional como internacional: «Necesitamos centrarnos en el valor agregado, destacando lo que Iguazú tiene para ofrecer más allá de los precios».
Inversiones moderadas y un contexto tributario adverso
Sobre las perspectivas de inversión, Blanco señaló que, aunque hay interés en pequeños emprendimientos, las grandes inversiones siguen limitadas por el esquema tributario: «Es fundamental que haya una baja real de impuestos y costos laborales para atraer inversiones. Sin incentivos claros, competir con otras provincias resulta difícil».
Blanco destacó la importancia del turismo como motor económico local y aseguró que la ciudad está preparada para recibir al turista de verano: «Puerto Iguazú ha mejorado mucho en infraestructura y servicios. Queremos que el turista disfrute su experiencia aquí y elija volver».
Perspectivas hacia el 2025
El titular de la Cámara de Comercio, se mostró optimista respecto al futuro, resaltando las recientes medidas económicas, como la reducción del impuesto país y la promoción de importaciones, que podrían estabilizar precios. Sin embargo, subrayó que será clave garantizar que estos cambios impacten positivamente en los costos finales y beneficien al consumidor.