Un avión privado, modelo Challenger 300 sufrió un despiste e incendio al intentar aterrizar en el aeropuerto de San Fernando, provincia de Buenos Aires. La tragedia dejó un saldo de dos muertos: el piloto y el copiloto.
La aeronave, propiedad de la familia Brito del Banco Macro, regresaba de Punta del Este con al menos cuatro personas a bordo. Al no lograr frenar a tiempo, el avión impactó en una zona de viviendas colindante al aeropuerto, según informaron testigos del incidente.
La situación se produjo cerca del mediodía y generó una intensa movilización de equipos de emergencia en el lugar. De acuerdo con declaraciones de testigos presenciales, el avión entró pasado a la pista de aterrizaje y, por razones que aún se investigan, no pudo detenerse a tiempo, lo que provocó su salida de pista y posterior colisión con estructuras residenciales cercanas.
Bombardier Challenger 300
El Bombardier Challenger 300 es un avión de tamaño Super Midsize Cabin, fabricado por Bombardier Aerospace, y puede alcanzar una velocidad de 870 km por hora gracias a sus motores gemelos Honeywell Engines HTF 7000.
Su altura de cabina es de 1.85 metros y un ancho de 2,18 metros. Su desarrollo comenzó a fines de la década de 1990, con la meta de establecer un jet privado de tamaño mediano y que ofrezca velocidad, autonomía y comodidad.
Además, sus motores garantizan una velocidad de crucero suave y una capacidad de largo alcance de hasta 3200 millas náuticas, en tanto que sus aletas incorporadas optimizan la eficiencia del combustible y amplían el alcance de la aeronave.
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FUENTE: Infobae.