En los últimos doce años, Abu Mohammed al-Golani, líder insurgente sirio, ha transformado su imagen y la insurgencia que lidera.
Renunció a sus vínculos con Al Qaeda, consolidó su poder y ahora lidera una ofensiva que ha devuelto a su grupo, Hayat Tahrir al-Sham (HTS), al centro del conflicto sirio. Esta ofensiva, que tomó control de Alepo, reaviva la guerra civil y desafía el control del presidente Bashar Assad.
Al-Golani, de 43 años, ha logrado eliminar competidores y antiguos aliados en su camino hacia el poder. Distanciándose de Al Qaeda, buscó presentarse como defensor del pluralismo y la tolerancia para ganar apoyo internacional y de minorías religiosas y étnicas en Siria. A pesar de la fortaleza del régimen de Assad, respaldado por Irán y Rusia, el reciente avance rebelde ha generado preocupación en países vecinos como Jordania, Irak y Líbano.
Nacido en Siria, al-Golani se unió a extremistas en Irak en 2003, combatiendo tropas estadounidenses y formando parte del Estado Islámico de Irak. Enviado a Siria en 2011, estableció el Frente Nusra, posteriormente etiquetado como terrorista por Estados Unidos. Al-Golani desafió a Al Qaeda y al Estado Islámico, consolidando su poder en la provincia de Idlib al frente de HTS.
Desde 2016, al-Golani ha trabajado en su imagen pública, distanciándose de Al Qaeda y rebrandando su grupo. En 2021, en una entrevista a PBS, enfatizó que HTS no amenaza a Occidente y abogó por la tolerancia, un cambio radical en su postura. Esta transformación busca legitimar su liderazgo y atraer un apoyo más amplio.
«Sí, hemos criticado las políticas occidentales, pero librar una guerra contra Estados Unidos o Europa desde Siria, eso no es cierto», declaró al-Golani.
FUENTE: Infobae.