La huelga de 24 horas que afectó los vuelos de Aerolíneas Argentinas en todos los aeropuertos del país finalizó este mediodía, aunque aún se esperan demoras en los servicios aéreos durante parte de la tarde.
La medida de fuerza fue impulsada por los gremios que representan a los pilotos y aeronavegantes, con Pablo Biró, líder de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), y Juan Pablo Brey, referente de la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA), como principales voceros.
El paro, que inició ayer y se extendió hasta las 12 de hoy, dejó varios vuelos cancelados y cientos de pasajeros afectados en todo el país. Aunque la actividad comienza a normalizarse, desde las aerolíneas advirtieron que las demoras podrían prolongarse hasta horas de la tarde debido a la reorganización de las operaciones.
En tanto, el ministro de Transporte, Federico Sturzenegger, cuestionó duramente la medida y afirmó que este sería «el último paro salvaje» en el sector, ya que el Gobierno implementará normativas que considerarán al transporte aéreo como un servicio esencial. Según el funcionario, esto obligará a los gremios a garantizar una mínima cantidad de vuelos durante cualquier medida de fuerza.
“Debemos poner fin a este tipo de acciones que perjudican a miles de usuarios y ponen en jaque a nuestra aerolínea de bandera”, declaró Sturzenegger, en relación a las pérdidas que genera cada paro en el sector. Asimismo, desde el Gobierno responsabilizaron a los trabajadores por el impacto que esta medida podría tener sobre el futuro de Aerolíneas Argentinas, que enfrenta un complejo escenario financiero.
