Los despachos de yerba mate al mercado interno de julio superaron a los de igual mes del año pasado, algo que no ocurría desde enero. En los cinco meses que separan ambas fechas, se acumuló una caída de 18 millones de kilos. La cosecha aumentó 40% interanual y se encamina a un récord.
Julio llegó con una buena noticia para el golpeado sector yerbatero. Después de cinco meses consecutivos de caída, los despachos de los molinos al mercado interno recuperaron el julio el volumen mensual habitual de los últimos cinco años.
De acuerdo con la estadística que maneja el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), en julio se vendieron casi 700 mil kilos de yerba elaborada más que en el mismo mes del año pasado en lo que representó la primera marca interanual positiva después de enero. En los cinco meses que separan ambas fechas, se despacharon 18 millones de kilos menos que en igual período del año pasado.
Mientras tanto, la cosecha avanza a ritmo acelerado, favorecida por el clima benigno después de dos años de sequía y porque las plagas este año dieron un respiro.
De enero a julio, los productores entregaron casi 740 millones de kilos de hoja verde, 40% más que en igual período del año pasado.
La combinación de una mayor cosecha y una caída en la demanda estableció condiciones de mercado desfavorables para los productores, situación que se pronunció con la desregulación establecida por el Gobierno nacional.
Los precios de la hoja verde cayeron prácticamente a la mitad en términos nominales respecto a diciembre del año pasado y los plazos de pago se extendieron.