La bolsa de Japón sufrió una caída histórica del 12% debido a un aumento en la tasa de interés que impactó en los mercados globales. Gerardo Alonso Schwarz, economista, explicó que este fenómeno se debe a cambios en la política monetaria del país asiático y detalló cómo afectó a los inversores. En Argentina, el cepo cambiario y el superávit fiscal nos protegieron de este “cimbronazo” financiero, indicó.
Schwarz mencionó que Japón decidió aumentar las tasas de interés la semana pasada, después de evaluar las condiciones económicas del país. “Las autoridades monetarias consideraron que no era tan necesario mantener tasas tan bajas y, a partir de ahí, comenzó la subida”, explicó. El cambio impactó de lleno en los mercados financieros internacionales.
El economista detalló que muchos fondos de inversión internacionales solían tomar créditos en Japón, aprovechando las tasas bajas para reinvertir en diversas opciones financieras, incluyendo acciones de empresas chinas, europeas y estadounidenses. Sin embargo, con el aumento de las tasas, este modelo de negocio dejó de ser rentable. “Muchos fondos tuvieron que vender sus posiciones o acciones por el hecho de que ya no tenían el financiamiento para enfrentar estas compras. Y ya no era tan buen negocio, no aseguraba tan buena ganancia”, aseguró.
El efecto dominó en los mercados
La reacción en cadena no se hizo esperar pues “ahí comenzó la psicosis” en el mercado, afirmó el jefe del Instituto de Estudios Económicos sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana. Dicho fenómeno se debe a que los inversores suelen actuar impulsados por el miedo y la avaricia. Ayer, el miedo predominó, contagiando a los mercados de Europa, Estados Unidos y el sudeste asiático, dijo, en tanto destacó que “hoy vimos una recuperación parcial del 10%, pero ayer la caída fue de casi el 13%”.
Un ejemplo claro de esta dinámica fue la venta masiva de acciones de Apple por parte del inversor estadounidense Warren Buffett. “Vendió la mitad de sus posiciones en un solo día”, señaló Alonso Schwarz, quien remarcó que esto demuestra cómo las decisiones de inversores influyentes pueden amplificar el pánico en los mercados.
El impacto en Argentina
El entrevistado explicó que el país no se vio afectado gracias al cepo cambiario y al superávit fiscal. “El hecho de tener todavía el cepo hace que nos protejamos tanto del crecimiento como de las caídas. Y eso el día de ayer fue algo positivo. Pero a su vez también tiene razón Milei al mencionar que el superávit fiscal hace que el Gobierno Nacional no tenga que estar pendiente de la tasa de interés mundial y no estar pendiente, por lo menos en el cortísimo plazo, de qué es lo que pasa con los mercados financieros para conseguir fondos, para financiar o para justificar y apalancar ese gasto público que hasta el año pasado fue muy deficitario”, argumentó.
Y completó: “Si estuviésemos totalmente integrados en los mercados financieros, eso nos da en épocas de bonanza la posibilidad de acceso a mayor financiamiento, mayores inversiones mundiales, etcétera. Y en épocas de caída o de crisis financiera, como lo que vimos ayer, también corrida financiera y salida de inversiones y salida de financiamiento”.