Aburrirnos, aunque normalmente suele verse como algo negativo y desgastante… puede tener varias ventajas en términos de bienestar emocional, creatividad y desarrollo personal. Aquí hay algunas razones por las que inclusive, aprender a aburrirnos, puede ser más beneficioso que todo eso que hacemos para entretenernos.
Ya sea estar usando el celular, organizando encuentros que no nos dejan nada, distraernos con estímulos externos o salir en busca de experiencias. Acompañarlo de serenidad, confianza y aceptación, colabora enormemente…
Te dejo algunas ventajas, ¿vamos?
Fomenta la creatividad:
– El aburrimiento puede ser un terreno fértil para la creatividad. Cuando estamos aburridos, nuestra mente tiene la oportunidad de divagar y explorar ideas no convencionales. Muchas ideas creativas y soluciones innovadoras han surgido de momentos en los que la mente tiene la libertad de explorar sin restricciones.
Desarrolla la resiliencia:
– Aprender a lidiar con el aburrimiento sin depender de estímulos externos ayuda a desarrollar la resiliencia emocional. Aprender a tolerar momentos de aburrimiento puede fortalecer la capacidad de enfrentar situaciones desafiantes con mayor calma y paciencia.
Estimula la autorreflexión:
– La falta de estímulos externos durante momentos de aburrimiento puede llevar a mirarnos a nosotros mismos. Este tiempo de reflexión puede ayudarte a conocerte mejor, identificar tus metas y valores, y evaluar qué actividades realmente te brindan satisfacción y significado, para ir por ellas.
Favorece la atención plena:
– El aburrimiento puede ser una oportunidad para practicar la atención plena o mindfulness. Estar presente en el momento actual, incluso cuando no hay actividades emocionantes, puede mejorar tu capacidad para disfrutar de la vida cotidiana y reducir el estrés. ¿Acaso te pasó alguna vez de estar detenido observando los movimientos de una mariposa o cómo un insecto hace su recorrido? Eso es sumamente beneficio para conectar con el aquí y el ahora!
Estimula la autonomía:
– En un mundo lleno de distracciones constantes, aprender a aburrirse puede fomentar la autonomía. No depender siempre de estímulos externos para entretenerse te permite desarrollar tu capacidad de encontrar satisfacción y significado desde dentro.
Mejora la tolerancia a la ambigüedad:
– La ambigüedad es una parte inevitable de la vida, y aprender a aburrirnos puede ayudarnos a tolerar la incertidumbre y la falta de claridad. Esta habilidad puede ser valiosa en situaciones en las que no siempre tenemos respuestas definitivas.
Promueve el descanso mental:
– La sobreestimulación constante puede agotar mentalmente. Aprender a aburrirse puede proporcionar descanso mental y permitir que la mente se relaje, lo que a su vez puede mejorar la concentración y la claridad mental cuando realmente se necesitan. Valiosísimo!
En resumen, aprender a aburrirnos puede ser una habilidad valiosa para cultivar, además un gran desafío para quienes fuimos criados en el “hacer” “aprovechar el tiempo” o “movernos”. Hoy la ciencia nos invita a volver a esos espacios de posibilidad, a parar y descansar, a cultivar nuestro ser.
Probá… fíjate cómo te va con eso… y después me contás.
Ester Inglese
Coach Ontológico Profesional. Socia AACOP 6580
Coach de Prosperidad en formación
wsp 3751 660207 / IG ester.inglese
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