«La mitad de esto es impuestazo y la otra mitad es licuación», resumió Melconian, señalando dos aspectos clave de las decisiones gubernamentales que, según él, afectarán directamente a la ciudadanía.
La denominación «impuestazo» hace referencia a la imposición de retenciones a las economías regionales y la intención de revertir la reducción del Impuesto a las Ganancias, aprobada por el Congreso durante la campaña presidencial. Además, se han implementado cambios en el Impuesto País, que grava las transacciones en dólares con diferentes porcentajes.
En cuanto a la «licuación», Melconian explicó que consiste en otorgar aumentos nominales a las prestaciones sociales, jubilaciones y otros rubros de gasto. Sin embargo, el problema radica en que estos aumentos no se traducen efectivamente en un poder adquisitivo real. Al dar un ejemplo, comentó: «¿Estás ganando 100? Bueno, te vamos a pagar 200. Te doy 100% de aumento. ¿Y cuánto hay de inflación? 200 por ciento. Eso significa que el pan y la gaseosa multiplicaron su precio por 3. Entonces, aunque me hayan dado más dinero, llego a casa y compro menos pan. ¿Qué pasó con mi sueldo? ¡Se licuó!».
Melconian también recordó la utilización de la licuación por parte del ministro de Economía de Alberto Fernández, Sergio Massa, para reducir el déficit. «Massa redujo un tercio el déficit primario y a la mitad el financiero. ¿Vos crees que contrató a Milton Friedman? ¿Cómo lo hizo? ¡Con licuación! ¡Con recontralicuación! Todos los meses anunciaba mejoras en las jubilaciones y en los planes sociales. ¿Entonces me puedes decir con todas esas mejoras cómo bajó el déficit? Con licuación», enfatizó el economista. Con información de Infobae.