A través de un pedido de la Justicia Federal, realizaron un allanamiento y detectaron irregularidades por parte de una empresa forestal, que tenía bajo su cargo a diez misioneros que recolectaban resina, viviendo en condiciones de precariedad.
José María Serbin, delegado regional del Comité Ejecutivo de la Lucha Contra la Trata y Explotación perteneciente al NEA, expuso que el allanamiento se realizó a partir de un pedido a cargo del Juzgado Federal Nº 1. Se trasladaron por un camino deteriorado hasta el lugar, ubicado en medio del monte en una zona cercana a Ituzaingó, Corrientes.
Al llegar al lugar, realizaron una evaluación del establecimiento y encontraron a diez trabajadores misioneros que se dedicaban a la recolección de resina, que ese día no pudieron salir a trabajar debido a una tormenta eléctrica. A raíz del allanamiento detectaron varias irregularidades por parte de la empresa como malas condiciones del lugar en donde se alojaban, el piso de tierra y el sueldo que los trabajadores percibían, mitad era en blanco, mitad en negro.
“Si bien las condiciones laborales del sector forestal han mejorado con el tiempo, hay varias irregularidades por mejorar”, dijo Serbin. Además, “como se trata de trabajos en donde se dividen por turnos rotativos semanales, estimamos que habría más trabajadores”.
A partir de la inspección realizada,” la causa prosigue en manos del juzgado federal, quien se encargará de definir si se trata de un delito, de un caso de trata o cuál es la tipificación que le corresponde”. Por este motivo, el delegado no pudo brindar detalles acerca de la empresa, ni de las medidas que se tomarán.
Además, Serbin también trajo a colación un antecedente de explotación laboral, ocurrido en la Cooperativa Tierra Roja de Chaco, que aún no está resuelto. El objetivo según mencionó, no es el de perseguir a los empresarios, sino es “para tomar conciencia y desnaturalizar todo lo relacionado a la explotación laboral en el ámbito rural o forestal”.
Mientras esperan a que se desenvuelva el caso y que la Justicia pueda obrar en la problemática, Serbin hizo hincapié en la importancia de denunciar estas cuestiones. “En la línea 145, disponible todos los días del año hay que denunciar todo tipo de irregularidades y sospechas de explotación, que no necesariamente es solo laboral, sino también sexual. También se pueden denunciar en la misma línea, los matrimonios forzosos, el tráfico de órganos y cualquier mera sospecha ante una situación irregular. Una llamada anónima puede salvar a una persona”, subrayó.
#Corrientes | Reconocida empresa resinera involucrada en presunta explotación laboral en un campo forestal en Ituzaingó https://t.co/5ApMblCEeY
— misionesonline.net (@misionesonline) October 23, 2022
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