El equipo de la capital venció 1-0 en su estadio y se mantiene en lo más alto de la tabla. A Kylian Mbappé le anularon un gol por offside y Donnarumma atajó un penal. Messi jugó todo el partido.
En el encuentro por la Fecha 7 de la Ligue 1 que París Saint Germain disputó en Parque de los Príncipes, Lionel Messi volvió a ser figura. En el 1-0 a favor frente al Brest, el argentino se mostró activo en un ataque que empieza a afinarse conforme avanza la temporada al lado de Neymar y Kylian Mbappé.
Apenas a los 10 minutos de partido Leo conectó con Neymar, advirtiendo lo que acontecería más tarde en el único gol del encuentro. Un par de minutos más tarde le pinchó una pelota a Bernat, que tocó atrás para un Mbappé errático que definió por encima del travesaño cuando daba la sensación de que el lateral había partido en posición adelantada. A los 19′, lo insólito: Messi encontró un rebote cerca del punto de penal, la bajó de pecho y remató de volea con la zurda, pero el balón rebotó en Mbappé y se desvió. Increíble pero real, el francés le ahogó el grito de gol.
Otro anticipo de la buena sociedad que armaron Messi y Neymar a lo largo del cotejo fue al minuto 24: pase filtrado del rosarino -con caño incluido- para el paulista, quien fue derribado por Christophe Herelle. El árbitro expulsó al defensor del Brest, pero luego se retractó porque había offside de Ney. A la media hora de juego, el número 30 se inspiró y ensayó un globo que dejó congelada a la defensa rival y le permitió a Neymar poner el 1-0 parcial para el PSG.
En la última de la primera parte, el 10 retribuyó con una asistencia a Messi, que definió débil por el asedio de un marcador y debido a que el esférico le quedó encima.
El complemento se inició con actividad, aunque sin efectividad. Mbappé, recostado como extremo izquierdo, centró a la cabeza de un Messi que conectó con la testa y se encontró con el poste de la valla defendida por el arquero neerlandés Marco Bizot.
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Más tarde el tridente ofensivo de Christophe Galtier armó una jugada de fútbol de salón: toques cortes y de primera hasta la profundización para Mbappé, que agarró mordida la pelota y la tiró afuera. A los 68′, Messi recogió un rechazo corto y remató con zurda desde la puerta del área grande a las manos del guardameta. Al PSG no le sobró brillo y de hecho tuvo que apelar a la intervención crucial de Gigi Donnarumma, quien le atajó un penal al argelino Islam Slimani al minuto 69 para mantener la diferencia en el tanteador.
Con la de hoy a Neymar, Messi acumuló su séptima asistencia en lo que va de la temporada de liga francesa sobre 7 partidos y es el líder absoluto en ese rubro. El detalle es que con este registro ya llegó a la mitad de las que gestionó en total al término de la 2021/2022 (el máximo asistidor del PSG fue Mbappé, con 17). En esta campaña le dio tres pases-gol al brasileño y cuatro al francés.
En cuanto a su faceta goleadora, arribó al quinto encuentro sin poder convertir. Su último tanto fue ante Lille en la goleada 7-1 (además anotó un doblete en el 5-0 al Clermont y gritó uno en la final de la Supercopa francesa ante Nantes). Se mantiene con 4 goles esta temporada.
Fuente: Infobae
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