El juez Federico Villena resolvió sostener la prohibición de salir del país para Gholamreza Ghasemi, junto a otros tres iraníes y tres venezolanos. Continúa la etapa de instrucción.
A casi dos meses del arribo del avión iraní de Emtrasur a Ezeiza, el juez Federico Villena resolvió este lunes mantener vigente la prohibición para salir del país de siete de los 19 tripulantes, entre ellos, cuatro iraníes y tres venezolanos. Los 12 restantes podrán volver a sus países.
La decisión del magistrado se circunscribe sobre los cuatro iraníes, entre los que se encuentran el piloto Gholamreza Ghasemi junto a Abdolbaset Mohammadi, Mohammad Khosraviaragh y Saeid Vali Zadeh, y los tres venezolanos: Víctor Pérez Gómez (gerente general de Operaciones), Mario Arraga Urdaneta, y el mecánico José García Contreras.
“El presente decisorio no tiene por objeto definir el grado de participación en los hechos investigados, por cuanto la instrucción aún no se encuentra finalizada. Por el contrario, únicamente se ha evaluado -tal como fue adelantado- si resulta razonable mantener la medida de prohibición de salida del país dispuesta”, destacó el juez en la resolución.
Gholamreza Ghasemi
En el caso de Gholamreza Ghasemi, se encuentra imputado por sospechas de vínculo con el terrorismo, ya que los resultados de un peritaje sobre su teléfono celular arrojaron la existencia de fotos de tanques, misiles e incluso de algunas banderas con consignas en farsí contra Israel. Además incluye fotos del piloto cuando era joven, caracterizado como miembro de la Guardia Revolucionaria Al Quds iraní.
En cuanto a Mohammadi, la resolución a la que tuvo acceso Ámbito señala que emn su teléfono celular se hallaron imágenes de su credencial que lo certifica como miembro tripulante de de Mahan Air. Al respecto, el magistrado señala que se halló un plan de vuelo de dicha compañía con la aeronave de Emtrasur, con ruta Caracas-Irán en la que no se advierte ningún tripulante venezolano.
Allí señala que además habría realizado 17 vuelos entre la ruta Teherán-Damasco con la aerolínea Fars Queshm Air, siete de ellos en compañía de Ghasemi y con una tripulación de solo tres miembros, y manifiesta que, según informó el FBI, dicha aerolínea opera vuelos de carga bajo cobertura civil para la Fuerza Qods y el IRGC, y los utiliza para contrabandear armas y equipos sensibles de Irán a Siria.
El fallo detalla un total de 118 medidas de prueba incorporadas al expediente desde el 13 de junio, fecha en que se abrió la causa judicial.
En paralelo, el juez manifiesta que existen indicios para retener en el país a tres venezolanos. Según Villena, Víctor Pérez Gómez y Mario Arraga Urdaneta están vinculados a una serie de irregularidades financieras vinculadas a la carga del avión, como la apertura de cuentas bancarias en Panamá y en Singapur, que habrían sido utilizadas para cobrar parte del dinero de los traslados.
Y agrega que en el caso de Pérez Goméz la Justicia le secuestró una nota dirigida a Samir Maklad. ¿Quién es Samir Maklad? La resolución apunta a que se trataría “de una persona que podría estar vinculado a Hezbollah y que, de acuerdo a fuentes abiertas, la familia Maklad podría ser dueña del Aeropuerto Santiago Marino de Nueva Esparta, ubicado en la República Bolivariana de Venezuela”.
Sin embargo, reconoce Villena que “se trata de meros indicios” pero considera “que deben profundizarse” debido a la importancia de conocer “no solo la veracidad o no de los documentos hallados sino también el grado de relación comercial que podría existir entre el aquí imputado y el grupo de ciudadanos venezolanos-libaneses destacados y la organización terrorista Hezbollah”.
En cuanto al mecánico García Contreras, el fallo de Villena destaca el hallazgo de “una serie de chats del 11 de junio del corriente año” en los que el sujeto hace referencia “a que “…Gracias a Dios no encontraron nada…” y a lo que su interlocutora le contesta “…Gracias a Dios. Yo estaba temblando con eso, pero no quería preguntar porque sé que están vigilados…”.
La resolución señala que “no tiene por objeto definir el grado de participación en los hechos investigados” ya que por el momento continúa la etapa de instrucción únicamente. La misma tiene por fin “si resulta razonable mantener la medida de prohibición de salida del país dispuesta”, algo que finalmente pesará para los siete tripulantes mencionados.
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Liberación de retenidos
De esta manera, 12 de los 19 tripulantes podrán abandonar el país. Su salida podrá ser realizada en vuelos de línea, aunque deberán seguir vinculados al proceso judicial. Si bien Venezuela e Irán no permiten la extradición de sus ciudadanos, el magistrado puso el foco en que, debido a que se dedican a la aviación civil y deben viajar constantemente, no podrían evadir la Justicia por tiempo indeterminado aunque así lo deseen.
“Esta circunstancia facilitaría su extradición, en tanto, resulta altamente probable que fueran sorprendidos en otro país distinto al de su nacionalidad. Ello, en el caso, claro está, que, en un futuro, el devenir de la investigación (fundamentalmente el resultado de los exhortos pendientes) modifique abruptamente su situación”, explicó.
Mientras tanto, la aeronave de Emtrasur continúa retenida en Ezeiza, hasta tanto los investigadores resuelvan las incógnitas que pesan sobre la titularidad de la misma, pese a los documentos aportados por los abogados de la compañía.
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