(Reuters) - La empresa estadounidense de biotecnología Moderna construirá un nuevo centro de investigación y fabricación para desarrollar vacunas en Reino Unido, contra las nuevas variantes del COVID-19 y otras enfermedades respiratorias y ayudar a mejorar la preparación para cualquier pandemia futura.
Según el acuerdo, Moderna realizará una inversión mínima en I+D de 1.100 millones de libras (1.350 millones de dólares), dijo el portavoz del primer ministro Boris Johnson, y añadió que tendría capacidad para crear 250 millones de vacunas en Reino Unido por año si fuera necesario.
Se espera que las instalaciones empiecen a producir vacunas en 2025, y que Reino Unido se comprometa a comprar las vacunas de Moderna durante la próxima década.
Las vacunas COVID-19 de Moderna, que utilizan la tecnología del ARN mensajero (ARNm), fueron algunas de las que se utilizaron en Gran Bretaña para hacer frente a la crisis y permitir a Johnson reabrir la economía tras los estrictos confinamientos.
El presidente ejecutivo de Moderna, Stéphane Bancel, dijo que la prioridad era desarrollar una vacuna que combine refuerzos renovados contra el COVID, la gripe y el virus respiratorio sincicial (VRS).
«Al construir una planta de vacunas en Reino Unido, también estamos proporcionando al Gobierno británico -que tiene una asociación a largo plazo con nosotros, con este acuerdo- la capacidad de estar preparados para la pandemia», dijo Bancel a Reuters en una entrevista el miércoles.
«Esa capacidad que estamos construyendo en el Reino Unido, que se ha comprometido a comprar el producto durante los próximos diez años, puede reasignarse muy rápidamente a lo que quieran».
El Ministerio de Salud británico dijo que la tecnología del ARNm podría aplicarse a otros ámbitos, como el cáncer, la gripe, la demencia y las enfermedades cardíacas.
«Nuestra inversión garantizará inyecciones en los brazos contra algunos de los virus más resistentes que existen, lo que nos situará en la vanguardia de la lucha contra futuras amenazas», dijo el primer ministro Johnson en un comunicado.
En diciembre, Reino Unido dijo que había encargado 60 millones adicionales de dosis de la vacuna Moderna COVID-19, que se entregarán en 2022 a 2023.
Bancel dijo que su objetivo era que un refuerzo específico de la variante estuviera listo para agosto, antes de la campaña de refuerzo prevista por Gran Bretaña en otoño, y Moderna dijo más tarde el miércoles que la vacuna había mostrado una fuerte respuesta neutralizadora a las subvariantes de ómicron BA.4 y BA.5, de rápida propagación.
El éxito de su vacuna ha llevado a la empresa a buscar su expansión mundial mediante nuevas instalaciones de fabricación previstas en Kenia, Canadá y Australia.
Bancel afirmó que la construcción del centro del Reino Unido debería comenzar este año, y que la ubicación estaba a punto de concretarse.
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— misionesonline.net (@misionesonline) June 19, 2022