Premier League | Liverpool es subcampeón y ya piensa en la final de la Champions

Los Reds se lo dieron vuelta a los Wolves, le ganaron 3-1 en un Anfield expectante, acabaron segundos a un punto en la Premier y ahora le apuntan sí y sólo sí al Real Madrid. El City de Guardiola tuvo una definición épica y dio vuelta su encuentro ante Aston Villa en 5 minutos.

El Liverpool peleó la Premier League hasta la última fecha, pero no le alcanzó porque el Manchester City lo dio vuelta y se consagró. El equipo de Klopp quedó segundo luego de ganarle 3-1 a los Wolves con goles de Mané, Salah y Robertson. Ahora, los Reds se enfocarán en la final de la Champions League, nada menos, que definirá el sábado ante el Real Madrid en París.

El equipo de Klopp llegaba partido decisivo con dos bajas más que sensibles. «No vamos a tomar riesgos», dijo Klopp sobre la presencia de Van Dijk y Salah en este partido de cara a lo que será su final de Champions la próxima semana. Aunque ambos, decisión del alemán, entraron en la convocatoria y comenzaron el partido en el banquillo.

Aunque para golpes el que iban a recibir nada más salir al césped. Un saque largo de José Sá habilitó la carrera del mexicano Raúl Jiménez, que le ganó la espalda a Konaté y encontró la línea de fondo para enviarle la pelota a Pedro Neto y que el luso derrotara a Alisson a placer cuando aún no se jugaban ni 3′ de partido. Agua helada para el cuerpo.

Tal vez te interese leer: Manchester City se lo remontó al Aston Villa con 3 goles en 5 minutos y se consagró campeón de la Premier League

Aunque, a partir de allí, la insistencia ‘red’ fue total. Los de Klopp insistieron por activa y por pasiva ante la presión de su gente, sabiendo que en Manchester los de Guardiola estaban en problemas. Y encontraron el premio gracias a una genialidad de Thiago, que se inventó un taconazo para habilitar a Mané y que el senegalés definiera con pierna derecha.

No obstante, los ‘scoursers’ recibieron la mala noticia tras el descanso: el centrocampista español tuvo que marcharse lesionado. Preocupa bastante a Klopp y los suyos pensando en la cita del próximo sábado ante el Madrid.

La segunda parte mantuvo el guion de apretar a fondo el acelerador. El Liverpool sabía que el triunfo podía significar la gloria. Por eso Salah, que terminó saltando desde el banquillo, celebró a rabiar su 2-1, aunque minutos después supo que no servía para mucho. Tampoco el 3-1 de Robertson. El Manchester City terminó llevándose el botín.

 

LA REGION

NACIONALES

INTERNACIONALES

ULTIMAS NOTICIAS

Newsletter

Columnas