La decisión de otorgar la prisión domiciliaria a Santiago Negrete, acusado de intento de homicidio, fue recibida con angustia por los familiares de su víctima, Manuel Sánchez, quien está bajo tratamiento psicológico para intentar superar el enorme trauma que le causó el brutal ataque de quien consideraba su amigo.
Los padres de Manuel Sánchez brindaron su testimonio en una conferencia de prensa realizada esta mañana en el Hotel Julio César de Posadas. Explicaron que quien fuera víctima de un macabro intento de asesinato fríamente planificado y ejecutado con saña criminal por Santiago Negrete, recibió la noticia de la prisión domiciliaria de su victimario con “angustia y desazón”, la misma sensación que embargó al resto de la familia.
Advirtieron que la salida de prisión de Negrete es un elemento que viene a complicar aún más la difícil tarea que está enfrentando Manuel para intentar superar el enorme trauma que le provocó el ataque de quien creía su amigo.
A continuación el testimonio completo de los padres de Manuel Sánchez:
Ante las recientes novedades judiciales, en la que se otorgó la prisión domiciliaria a Santiago Negrete, quien intentó asesinar a nuestro hijo Manuel, y también por respeto y consideración al trabajo de los periodistas y medios que insisten con conocer nuestra opinión, organizamos esta convocatoria para realizar una declaración pública.
Queremos pedirles que entiendan que es muy difícil para nosotros responder a entrevistas con cada uno de los que nos llaman. Les estamos muy agradecidos por el apoyo y acompañamiento, pero vivimos una exposición y demanda que no buscamos ni deseamos, y que de atender, nos impediría enfocarnos en lo único que nos importa, que es la recuperación total de nuestro hijo, y la contención a su hermano que también está sufriendo muchísimo con esta situación.
Por eso esto es una declaración, no es una conferencia de prensa, no podemos responder preguntas ni brindar respuestas, porque tampoco nosotros las tenemos.
Ante la novedad judicial de la prisión domiciliaria a Santiago Negrete que conocimos el viernes pasado, nos vimos nuevamente movilizados emocionalmente. Manuel en primer lugar, su hermano, nosotros como padres, toda la familia, nuestros amigos, conocidos, compañeros de trabajo, e incluso gente que no conocemos, todos volvimos a experimentar angustia y desazón.
Nuestra prioridad absoluta es proteger y contener a Manuel: él está haciendo un esfuerzo enorme por salir adelante y está muy bien acompañado por su psicólogo. Sin embargo, la noticia del arresto domiciliario fue muy movilizante para él y para todos nosotros.
Como padres nos preocupa que pueda seguir su vida normal, que se pueda concentrar en el estudio, que pueda sentirse libre para salir a pasear, que pueda sentir que puede caminar por las calles sin tener que darse vuelta a mirar para atrás a cada rato. Que deje de sentir miedo.
Aunque ninguno de nosotros es especialista en cuestiones jurídicas, tratamos de comprender y acompañar las decisiones judiciales. Suponemos que el arresto domiciliario es una cuestión transitoria.
Acatamos la decisión y los procesos de la Justicia y respetamos la Ley. Mientras esperamos con ansias el juicio y la condena más justa para un accionar tan descomunal, impactante e inentendible como el que le tocó vivir a nuestro hijo.
Confiamos en el accionar de la Policía, confiamos en que nos cuiden como hay que cuidar a todo ciudadano que está en riesgo.
Confiamos en el Patronado de Liberados, pedimos por la seguridad de nuestro hijo, en que realicen el control y monitoreo del detenido, porque en esta confianza que depositamos nosotros está representada la confianza de toda la sociedad.
Queremos agradecer infinitamente el acompañamiento de los medios de la ciudad y de toda la provincia. La mayoría nos cuidó y cuidaron con mucho respeto a Manuel.
Por último, y con especial deferencia, queremos agradecer a toda la sociedad misionera, que estuvo siempre presente y que nos demostró su apoyo incondicional.
Manuel Sánchez no es sólo nuestro hijo; es el hijo de muchas madres y muchos padres, es hermano, es sobrino, es nieto, es amigo, es vecino, cualquiera puede ser Manuel, por eso les pedimos que nos ayuden a seguir cuidándolo, que estemos alertas y nos avisen si ocurre algo que no corresponde.
Nosotros solo deseamos superar este tiempo cuidando de nuestros hijos, a los que educamos con los mejores valores, y los sabemos gente de bien.