Ataque en Corrientes | Otros hechos similares al que vivió el diputado Miguel Arias, baleado en pleno acto

En medio de la conmoción que causó ayer el ataque en Corrientes contra el diputado provincial peronista Miguel Arias, a quien dispararon mientras participaba del cierre de un acto de campaña, el periodista Pablo Miguel enumeró desde su cuenta de Twitter diferentes atentados contra políticos y empresarios en esa provincia.

 

Arias, baleado en el abdomen en un acto del Frente Corrientes de Todos en la localidad de Tapebicuá, ubicada a 50 kilómetros al norte de Paso de los Libres, fue inmediatamente llevado a un hospital donde lo operaron, según confirmó el intendente de esa localidad, Tincho Ascúa, con resultado favorable.

 

El incidente de ayer se dio horas antes de un día clave en la provincia, en tanto este domingo Corrientes celebra elecciones provinciales para elegir gobernador y vice, cinco senadores y 15 diputados provinciales, además de intendentes y concejales en 57 municipios. En este marco el gobernador radical Gustavo Valdés aparece como favorito para acceder a la reelección con Fabián Ríos, del Frente Corrientes de Todos, como principal adversario.

 

Luego del hecho, el periodista correntino Pablo Miguel, desde Twitter, expresó: “No hay en la historia de Corrientes un hecho similar al ataque a Miguel Arias. Un legislador en funciones que es atacado en pleno acto político a 3 días de las elecciones. Gravísimo por donde se lo mire”.

 

Después comenzó a postear los diferentes ataques que se dieron en Corrientes contra políticos y periodistas e hizo referencia al caso del diputado nacional Rodolfo Martínez Llano, a quien en diciembre de 1999 “le mandaron una carta bomba y sufrió serias heridas en sus manos”.

 

Ese hecho ocurrió el 20 de diciembre de 1999 apenas llegada la intervención federal a la provincia. Por esa época el exgobernador y hombre fuerte de Corrientes, Raúl “Tato” Romero Feris, líder del PANU (Partido Nuevo), estaba detenido por diferentes denuncias de corrupción y la provincia atravesaba una crisis social originada en la falta de pago de salarios de policías, docentes, y agentes públicos y de la Justicia. Las primeras versiones señalaron el acto intimidatorio como responsabilidad de Romero Feris.

 

 

Además, Miguel se refirió a la agresión sufrida por una política en funciones: “Ana María Pencieri, en julio de 1999, casi fue linchada por manifestantes. Fueron a atacar Radio Sudamericana y la entonces diputada del PANU justo pasó por enfrente. De suerte pudo subirse a un remis”.

 

Otro caso al que hizo referencia fue el del esposo de Pencieri (quien en ese día de 1999 también había sido linchado con su esposa), exdiputado nacional y legislador provincial, Nicolás Garay. El 19 de diciembre de 2002 “fue baleado en su casa″ y, según Miguel, “era más un ajuste de cuentas”. Por el atentado el funcionario “quedó en silla de ruedas”.

 

El periodista también enumeró otros ejemplos en los que las causas de los decesos son aún hoy un enigma. Así nombró a Santiago Prado, quien el 9 de diciembre de 2001, a horas de asumir como intendente de Mercedes, apareció muerto. “Aparentemente se suicidó”, escribió.

 

Con respecto a ese caso, en un primero momento fue detenida la esposa como sospechosa de haberlo matado, pero luego se determinó en la Justicia que el hombre se suicidó frente a ella. Prado había sido elegido con el 70% de los votos para ocupar el cargo en reemplazo de Ricardo Colombi, que llegaba a la gobernación.

 

Es difícil no acordarse también de Hernán González Moreno, un empresario de los medios que apareció muerto 2 días antes del ballottage de 2009″, sumó Miguel. “La investigación cerró como suicidio. Era un empresario de los medios que manejaba millones de pauta en el gobierno de Arturo Colombi”, explicó. El caso de González Moreno conmocionó a Corrientes, meses antes, el empresario había denunciado al primo de Colombi, Ricardo (quien luego sucedió en el cargo a Arturo), por corrupción.

 

Otro hecho policial vinculado a un legislador en funciones, según detalla Miguel, fue el de Rubén Suárez. “El senador provincial y secretario general de la UTA que en junio de 2019 apareció muerto flotando en el río Paraná”, escribió por último.

 

Suárez, quien hacía 10 años estaba al frente de la organización gremial, ese año finalizaba su mandato como senador provincial, banca a la que había accedido con el frente oficialista Encuentro por Corrientes. La primera hipótesis de la muerte fue “suicidio”.


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