Agustina dejó la escuela para hacerse cargo de la casa y vive de las changas que consigue su padrastro.
Con tan solo 16 años, Agustina debió hacerse cargo de una terrible situación: superar la muerte de su mamá y dejar la escuela para cuidar de sus siete hermanitos.
“No estudio para cuidar a mis hermanos. Mi padrastro no tiene trabajo y sale a hacer algunas changas. Estamos pasando una situación muy difícil, más aún sin mi mamá. Ella nos daba aliento, nos empujaba a salir para adelante y llegaba siempre con las manos llenas para darnos de comer”, lanzó la adolescente a LaPlata1.com.
La mamá de los ocho niños falleció de meningitis durante la pandemia y según detalló Agustina no solo debe hacer malabares para darle de comer a sus hermanos sino que también la infraestructura de su casa se está arruinando.
“La casa se está cayendo lentamente también, necesitamos de todo”, agregó. Quien pueda colaborar con los chiquitos debe comunicarse al 221 440 4363.
Fuente: Telefe Noticias
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