El presidente Alberto Fernández declaró el estado de emergencia hídrica por 180 días en la región de la cuenca del río Paraná ya que la histórica bajante que se registró en la región afecta a las provincias de Misiones, Formosa, Chaco, Santa Fe, Entre Ríos, Corrientes y Buenos Aires debido a la escasez de lluvias que se viene registrando desde hace ya un año y medio y que seguiría hasta fin de año en toda la Cuenca del Plata.
Daniel Fernández Cata – Red Ciudadana
Al respecto, el titular de la Dirección de Alerta Temprana dependiente del Ministerio de Ecología, Daniel Fernández Cata, comentó que “estamos ante una emergencia hídrica debido a que no hay eventos de importancia que permitan pensar que la sequía extraordinaria que estamos viviendo se pueda superar”. Y reconoció que “es un escenario realmente grave que justifica el Decreto de Necesidad y Urgencia de parte del Gobierno nacional para ayudar a todas las provincias afectadas”.
Sobre el tiempo de duración de la sequía, indicó que los pronósticos climatológicos muestran que la misma continuará por los próximos seis meses. “Hay un pronóstico trimestral emitido por el Servicio Meteorológico nacional que está en consenso con varios organismos de la región en el que advierten que este déficit de lluvias va a persistir por los próximos tres meses y adicionalmente nosotros seguimos los pronósticos climatológicos de un centro de referencia de nivel internacional de la Universidad de Columbia de los Estados Unidos que tiene pronósticos en ese mismo sentido hasta los últimos meses de este año 2021”.
Según señaló Cata, la resequedad del suelo y de la vegetación, sumado al ingreso del frío y las heladas que se producen a esta altura del año, generan un aumento de peligrosidad de incendios. “Por lo que estamos evaluando que en el mes de agosto los índices de peligrosidad de incendios podrían aumentar también con la influencia de los vientos del norte”, dijo. Y agregó que “además, estamos analizando las medidas que optaremos para prevenir este escenario”.
Advierten sobre el fenómeno climático cíclico “La Niña”
El titular de la Dirección de Alerta Temprana se refirió también a la posibilidad de que haya un segundo evento del fenómeno climático La Niña: “Hay probabilidades de un 45 por ciento de que a fin de año se presente un segundo evento del fenómeno La Niña”, dijo. Aunque reconoció que “a esta altura es muy prematuro aún hablar de esta posibilidad, pero si este fenómeno se presenta complicaría aún más toda esta situación de sequía que se esta viviendo en la región”.
“La Niña” es un fenómeno climático cíclico que se produjo por última vez el año pasado y culminó en los primeros meses del 2021.
Medidas que implementaron desde Nación
El Gobierno informó que asignó 1000 millones de pesos para mitigar los efectos de la bajante, que incluyen “la afectación sobre el abastecimiento y calidad del agua potable, la navegación y operaciones de puerto, el ecosistema, la fauna íctica y la generación de energía hidroeléctrica”.
Además, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible incrementó la presencia de brigadas y medios aéreos e instalación de sistema de cámaras de detección temprana de humo y calor, debido a que los incendios forestales y de pastizales en la zona del Delta se reproducen en invierno sólo cuando hay bajantes históricas.
La bajante también empuja importantes pérdidas en provincias cuyas ciudades importantes, como Rosario, Santa Fe y Paraná, necesitan su curso para abastecerse de agua potable.
En el caso de la provincia de Santa Fe, se estima que tuvo que invertir unos 450 millones de pesos para mantener el servicio, según un informe del diario La Capital de Rosario. “Extraer del río tal cantidad de agua para potabilizar y distribuir no solo es más complejo cuando el río se retira, sino también mucho más costoso”, advierte la publicación.
Por el lado del Estado provincial, Cata contó que sobre el abastecimiento del agua “se está evaluando, ya que no todas las localidades de la provincia se abastecen del agua del río, por lo que también se está evaluando la situación de los pozos que abastecen a las distintas localidades”, dijo. Y agregó que “se está pensando en medidas que ayuden a superar esta situación ya que tanto los recursos superficiales como subterráneos se ven afectados”.
Sin embargo, indicó que “por el momento la situación en la provincia es estable, aunque continúa habiendo un déficit de lluvia la situación podría agravarse”. Es por ello que, según precisó “se están analizando medidas para racionalizar el abastecimiento del agua, además se están viendo fuentes alternativas para una mejor provisión de agua”.
“Es importante que todos seamos conscientes de esta situación y aportemos desde lo individual hasta lo comunitario sobre un uso racional del agua”, manifestó Cata.
Respecto a la peligrosidad de incendios, señaló que “se están analizando medidas para enfatizar y difundir más en la población la situación de los índices de peligrosidad ya que pueden exponerse en estado extremo y eso significaría que pueden ocurrir incendios que serán difíciles de controlar. Es por ello que, a través de folletos y los medios de comunicación, pretendemos concientizar a las personas sobre esta situación”.
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