El sacerdote Alberto Barros, titular de Cáritas Diocesana Posadas opinó sobre el informe presentado en conjunto por el Observatorio de la Deuda Social, de la Universidad Católica Argentina (UCA) denominado “Un rostro detrás de cada número. Radiografía de la pobreza en Argentina”. Se trata de un estudio que ofrece un análisis de la grave situación social que atraviesa el país y las políticas sociales para atender la emergencia en medio de la pandemia.
Alberto Barros- Radio Republica
Barros consideró que la realidad argentina actual en cuanto a los números de la pobreza, que según el informe de la UCA ascendió al 44,2 por ciento durante la pandemia, es “un panorama muy doloroso”, principalmente porque hay un 60 por ciento de niños en el país en situación de pobreza
Debido a este contexto, de acuerdo a los dichos del cura, Caritas pone el foco principalmente en la niñez y en poner un rostro detrás de los números: “Si tenemos semejante nivel de pobreza en los menores esto implica un futuro muy desalentador (…) un chico que crece en esta situación, va a terminar en un adulto excluido del sistema”, comentó.
En ese sentido, señaló que no se trata solamente de una problemática de pobreza estructural que se viene arrastrando hace años, sino que a causa de la pandemia, muchas personas de la clase media humilde se vieron en la necesidad de asistir a comedores y/o merenderos, inclusive en muchos casos comenzaron a pedir ropa, situaciones que años atrás no pasaba.
“Esta es la época más dura y de mayor impotencia, porque no se puede responder a tantísimas situaciones de reclamos que hay, y desde Caritas hacemos lo que podemos, pero con esa sensación de impotencia de ver que hay muchísimas cosas que no se solucionan”, lamentó Barros.
Por otro lado, también abordó los inconvenientes que considera que trajo a nivel país la falta de clases presenciales, producto de las restricciones impuestas por el Gobierno para evitar mayores contagios.
“Tantos meses sin la presencia de los chicos en las escuelas también hizo que muchos quedaran fuera del sistema”, subrayó. Barros, señaló que teniendo en cuenta el complejo contexto que se vive, hay una necesidad que las dirigencias políticas encuentren el diálogo para resolver la crisis. Además, hizo hincapié en la corrupción como generador de pobreza, inequidad y desigualdad.
El informe de la UCA y Cáritas
El Observatorio de la Deuda Social, de la Universidad Católica Argentina (UCA), presentó un nuevo informe para repasar los efectos directos que la pandemia del coronavirus tuvo sobre un drama que demanda reformas radicales y urgentes.
En diciembre del año pasado, la UCA calculó que el 44,2 por ciento de las personas se encuentran por debajo de la línea de la pobreza. Y ahora presentó sus conclusiones sobre las carencias que afronta ese universo de personas y sobre los daños colaterales que generó la llegada del virus que aún mantiene en vilo a la Argentina y al resto del mundo.
En su trabajo denominado “Un rostro detrás de cada número: radiografía de la pobreza en la Argentina”, el centro de estudios identificó que en 2020 hubo un salto de 4,6 puntos porcentuales en la matriz de la pobreza multidimensional de la población urbana, es decir, de las carencias no sólo sujetas a los ingresos económicos sino también a las condiciones de alimentación y salud, vivienda, al acceso a la educación y a servicios básicos, entre otras.
Al presentar el informe, Agustín Salvia, director del Observatorio de la Deuda Social de la UCA, sostuvo que dar a conocer esos datos también “es una manera de interpelar a las dirigencias políticas y económicas de nuestro país acerca de que nuestras deudas sociales son estructurales y que hay que abocarse con políticas de cambio estructural a esas realidades”.
Salvia volvió a destacar que “se hubiese duplicado la pobreza extrema” sin la Tarjeta Alimentar o el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE), programa que se aplicó durante la cuarentena estricta del año pasado y que se destinó a 9 millones de personas que recibieron tres pagos mensuales de 10 mil pesos por beneficiario. Sin embargo, aclaró que esos planes oficiales sin apenas un alivio para la situación que transita el país.
También calculó que el golpe de la primera ola del coronavirus provocó la pérdida de casi 800 mil empleos, de los cuales el 80 por ciento eran del sector informal. “El desempleo en la Argentina hoy ya no sería del 13,5 por ciento que hemos señalado, sino que llegaría al 28,5 por ciento”, alertó.
Pobreza e inflación se deben al gasto público ineficiente desde hace 10 años afirma Gerardo Schwarz
Bajó la pobreza en Posadas al mismo tiempo que aumentó en el resto del país
La pobreza subió a 42% al cierre del segundo semestre de 2020 y ya alcanza a 19 millones de argentinos
