El ex intendente, médico y director de Zona Norte de Salud Pública, se reflexionó respecto a la necesidad de que los vecinos de Colonia Wanda y localidades vecinas «tomen real conciencia, cumplan las restricciones vigentes y adopten las medidas de seguridad vigente respecto a los protocolos de prevención por COVID-19».
El profesional de la Salud dio su visión en una entrevista, ante la consulta respecto a la preocupación que se planteaba en la comunidad – a través de las redes sociales – por el riesgo que consideraban implicaba la parada anual técnica de la planta de Celulosa de Arauco Argentina, en Puerto Esperanza. Durante el 5 de mayo hasta los primeros días de junio, se movilizaron unas 2300 personas – de la zona, de otras provincias y del extranjero- para realizar los trabajos programados de mantenimiento técnico, en el marco de un protocolo de Salud y Seguridad propuesto por la compañía y aprobado por el gobierno provincial.
«Creo que la complejidad para el control se presentó porque había personas que trabajaban en la parada de planta en Puerto Esperanza y fueron alojadas en diversos hospedajes de la zona norte y al salir de sus actividades están en contacto con la comunidad local donde el virus circula. Por más que los resultados de PCR le dieron negativo a estas personas para ingresar a Misiones y se controle antes de ingresar a la industria, después de la jornada laboral todos volvían a sus casas o alojamientos, e interactúan con la comunidad», explicó Frowein.
El director de Salud Pública también es concejal por el Frente Renovador en Colonia Wanda, y desde ese rol explicó que el Concejo Deliberante de Wanda estaba informado de las actividades que se llevarían adelante en el transcurso de mayo y respecto a los protocolos que llevaron adelante en Arauco Argentina. “Son muy rigurosos sus protocolos para toda persona que ingrese a trabajar a la industria y para sus propios operarios. Tienen controles respecto al uso de barbijo, el distanciamiento dentro de la industria tanto para el personal directo como para sus contratistas, proveedores y empresas de transporte. Han montado toda una infraestructura especial para los test diarios, todas acciones para disminuir riesgos de contagios, pero de todas formas, nadie está exento de contraer el virus porque hay una interacción después desde la empresa con la comunidad, y en Wanda el incumplimiento del protocolo es una realidad”, dijo Frowein.
Pero su mayor preocupación «aún es la gente de la comunidad, no la empresa. Hay que trabajar más desde los municipios para generar conciencia en la población de Wanda, Libertad, Puerto Esperanza y Puerto Iguazú respecto a lo complejo que la situación de contagios de COVID-19 donde la curva va en ascenso y los vecinos aún así no cumplen las medidas de seguridad básicas y obligatorias”, recalcó el director de Zona Norte de Salud Pública.
“La realidad es que la mayoría de los vecinos en Wanda no acatan las mínimas recomendaciones. Con recorrer las localidades, los barrios, los supermercados, se puede observar que no usan el barbijo o no lo usan en forma adecuada, no cumplen el distanciamiento social, organizan reuniones familiares, es decir, aún no pasan de la queja a los cambios reales de hábitos. Los invito como medios de comunicación a que recorran Wanda. Todos somos responsables de cuidarnos del COVID-19, tanto la empresa Arauco, sus trabajadores, la sociedad y el gobierno, pero aún hay mucho que no lo entienden en la localidad”, expresó el director de Salud Pública de la Zona Norte.
En esta línea, el médico remarcó que “urge en la zona la necesidad de una fuerte campaña de prevención ante los casos de COVID-19 positivos que se están dando con una curva que va creciendo en cuanto a casos positivos testeados”, expresó Frowein.
Desde el uso de barbijo correcto, el evitar compartir el mate, las reuniones familiares, el distanciamiento social, entre otras recomendaciones que por razones culturales no se logra que la practiquen en la vida cotidiana. «El virus de COVID-19 es de circulación comunitaria, nadie está exento de contagiarse, no hay culpables en esto, es una pandemia y hay que cuidarse uno, para cuidar a los demás», expresó en diálogo con ArgentinaForestal.com.
Una de las «burbujas» montadas frente a la planta de Celulosa de Arauco para el control de COVID-19
Cambiar los hábitos
Para el médico, que también es concejal de Wanda, hay aún un fuerte trabajo de prevención y comunicación que reforzar desde el municipio porque “veo diariamente que la gente no toma real conciencia de la gravedad de la circulación del virus en todo el territorio provincial, y en Wanda en particular. No se puede naturalizar la presencia del virus por COVID-19″, dijo Frowein.
Insistió en la necesidad de «cambiar los hábitos y costumbres, es una nueva forma de vivir adoptando recomendaciones que son importantes de cumplir porque al cuidarse se trata de evitar más muertes. Más allá de ese audio anónimo que circuló sobre esta presunta denuncia de incumplimiento de la empresa en el protocolo, esto es algo que si fuera real se debe denunciar ante los organismos correspondiente. Por otro lado, el no cumplimiento del protocolo no se debe a una sola empresa, es responsabilidad de todos los empresarios de servicios y sus trabajadores, de los operarios de la planta, de sus familias, de todos los vecinos. Lamentablemente en nuestro municipio la toma real de conciencia para mucha gente llegó con la muerte del intendente Felipe Jeleñ», reflexionó en la entrevista.
En este sentido, sostuvo que “el fallecimiento del intendente Jeleñ consecuencia del COVID-19 fue un quiebre en la comunidad, lamentablemente es así. Desde el dolor muchas personas tomaron más conciencia. No digo que hay que tener miedo, eso no es sano tampoco. Pero si respeto por el virus y las enfermedades en la que puede derivar. Evitar por ello el contagio, porque es la manera de proteger a las familias, a sus compañeros de trabajo o con los que diariamente se convive. Es cuidarnos entre todos, pero realmente cuidarnos. De eso hablo, y puedo decir que en estas últimas semanas recién se empezó a notar más cuidado en la comunidad, pero aún hay mucho por cambiar para entender la gravedad de esta pandemia”, expresó el médico.
Continúan el programa de vacunación en Wanda. «Falta poco, pero aún no se ha logrado el objetivo. Tenemos toda la esperanza de poder lograrlo, la vacuna está llegando a la mayoría. Debemos seguir cuidándonos entre todos», fue el mensaje a la comunidad del médico Jorge Frowein.
A Felipe Jeleñ lo reemplazó en la Intendencia en forma interina el concejal Andrés Kupper, quien reactivó el Comité de Crisis – del que participa el director del Hospital y las fuerzas de seguridad- y restablecieron desde el viernes 21 de mayo las medidas de restricciones, con una resolución ad referéndum del Concejo Deliberante de la Colonia Wanda.
“Los operarios, profesionales y especialistas deben ajustarse a un riguroso control para trabajar en Arauco, pero si en los hoteles, en el supermercado, el restaurante o donde quiera circulen la gente no toma los recaudos, el contagio de COVID-19 es una posibilidad real, porque el virus es de circulación comunitaria”, remarcó.
“En el caso de Salud Pública, no es nuestro rol controlar que la gente cumpla con el protocolo sanitario. Nosotros lo que hacemos son los testeos, llevamos adelante el programa de vacunación, atendemos a quienes requieren aislamiento interno, recomendamos a los pacientes positivos el tratamiento con Ivecmetrina. En el caso de aquellos pacientes de mayor riesgo por edad, obesidad, diabetes y demás, aplicamos tratamiento con niveles de plasma”, detalló Frowein.
En esa línea, a más de un año de la pandemia y con la curva en ascenso por contagios dijo que “excede a Salud Pública controlar a los vecinos en el cumplimiento de lo mínimo que se les pide: quedarse en casa en lo posible, usar en forma correcta el barbijo, no organizar ni asistir a reuniones sociales, no compartir el mate, lavarse las manos en forma frecuente, y estar muy atentos a la temperatura corporal. Estas recomendaciones son parte del cambio cultural que en Wanda cuesta mucho lograr que las personas incorporen, y eso es un riesgo de posible contagio”.
Para el médico, no hay margen para relajarse en la comunidad “porque mueren personas por ello”. Para graficar con un ejemplo sencillo, dijo que “si uno entra al supermercado y no todos los que ingresan tienen barbijo, y el dueño del negocio tampoco se lo exige a esa persona para ingresar porque piensa que si lo hace pierde un cliente o una compra, en realidad lo que debería pensar es que está salvando una vida. La suya propia, la de sus empleados y sus clientes. Esto es lo que aún no se logra comprender en Wanda y localidades vecinas”, insistió Frowein.
El médico indicó que la curva de contagios incrementó en los últimos meses en la localidad y en la actualidad “está en una meseta alta. Hay que lograr bajar la misma. La vacunación ayudará en ello, pero manteniendo las mismas restricciones actuales de confinamiento y los protocolos de prevención. Falta menos, pero aún no se ha logrado el objetivo. Tenemos toda la esperanza de poder lograrlo, las vacunas están llegando a la mayoría de la población. Debemos seguir cuidándonos entre todos”, fue el mensaje del profesional.
Por Patricia Escobar
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