El 28 de mayo fue declarado el Día de los Jardines de Infantes y de las Maestras Jardineras en nuestro país, en memoria a la Rosario Vera Peñaloza, más conocida como la “maestra de la patria”
Cada 28 de mayo los jardines de infantes están de celebración ya que esta fecha corresponde al Día de los Jardines de Infantes y de las Maestras jardineras: una figura de vital importancia para los pequeños en desarrollo.
La fecha fue elegida en honor a la recordada maestra y promotora educativa Rosario Vera Peñaloza, reconocida en el país como «la maestra de la patria» por su incansable búsqueda y dedicación a la docencia.
Rosario Vera Peñaloza: La maestra de la patria
Rosario Vera Peñaloza nació en Atiles, La Rioja, en el año 1873. En su carrera docente, recorrió todos los estamentos del rol: maestra jardinera, docente de grado, profesora, directora, supervisora, inspectora, fundadora de institutos educativos y capacitadora pedagógica en enseñanza primaria y media, tanto pública y privada.
Se ubicó en un encuadre positivista de la tarea, planteó una perspectiva conceptual de “Círculos Concéntricos” con eje en la Geografía, tomando como referente la presencia del hombre en la naturaleza, enfoque que se despliega en la obra de Joaquín V. González. Formó parte de la corriente pedagógica de la “Escuela Nueva” surgida en las Escuelas Normales.
Participó en el armado del Instituto Bernasconi desde su inauguración y se ocupó de diseñar y articular el Primer Museo para la Escuela Primaria.
Recorrió el país investigando su geografía y el hábitat humano, recogiendo en su periplo material fotográfico que documenta aspectos geográficos, históricos y sociales. Desarrolló un concepto de nación de raigambre popular, rescatando la tradición criolla y de los pueblos originarios.
Murió finalmente el 28 de mayo de 1950, fecha elegida para celebrar el «Día de la Maestra Jardinera» y el «Día de los Jardines de Infantes».
Por qué son tan importantes los Jardines de Infantes
A medida que niños y niñas crecen, van ampliando su espacio de indagación y conocimiento.
Especialmente a partir de los 2 años, el juego y la exploración se convertirán en el principal mecanismo de aprendizaje.
En el jardín infantil niños y niñas aprenden a vivir y compartir con otros compañeros, peculiaridad que no suele ser nada fácil a los 2 a 4 años, cuando están comenzando a reafirmar su identidad y una posición en el mundo.
El jardín infantil posibilita que desarrollen la capacidad de convivir con otros y respetarlos. La experimentación y el juego que se produce en el espacio del jardín infantil, les permite profundizar en las aproximaciones a un lenguaje oral más complejo, ampliando su vocabulario y acercándose a algunas nociones matemáticas que después serán vitales para procesos más complejos.
Aparte, el desarrollo del vocabulario de un niño que asiste a un jardín frente al que no lo hace es realmente significativo.
En una sociedad como la nuestra, donde padres y madres trabajan horas, y llegan cansados a su hogar, la televisión se convierte en el principal estímulo, niños y niñas requieren de un espacio de contención, estimulación, exploración y aprendizaje compartido que sólo el jardín infantil puede ofrecer.
El jardín infantil, y especialmente las educadoras y asistentes de sala, cumplen un importante rol en el desarrollo cognitivo, psicomotor y socioemocional de niños y niñas, ya que posibilitan un tránsito armonioso entre la autonomía y la contención que todo niño/a requiere para sentirse seguro en un espacio que le es nuevo.