Paraguay: al colapso sanitario por Covid-19 se suman casos de dengue

La República del Paraguay atraviesa su peor momento epidemiológico y sanitario debido al notable incremento de casos de Covid-19 que llevó a colapsar la estructura sanitaria de distintas regiones del país vecino. A pesar de no representar un riesgo, se siguen notificando casos de dengue.

 

En los últimos días, la Dirección de Vigilancia de la Salud de Paraguay reportó más de 700 notificaciones de casos sospechosos de dengue, mientras que Asunción, Concepción, Presidente Hayes y Alto Paraguay se hallan por encima de 200 notificaciones acumuladas en las últimas cuatro semanas.

 

“Un total de 800 son los casos confirmados de dengue a nivel país y la mayor concentración de afectados se encuentra en Concepción, le sigue Presidente Hayes y por último, Alto Paraguay” señalaba el reporte.  Asimismo, en referencia a los casos sospechosos, se reportaron una leve disminución. Sin embargo, en las últimas cuatro semanas todos los departamentos a nivel país registraron un aumento en las notificaciones de casos de dengue.

 

Si bien los números reportados no son alarmantes a comparación de periodos anteriores, el contexto sanitario en Paraguay es complejo por el covid-19. Años atrás el sistema sanitario se vio afectado por una gran epidemia de dengue que llevó a la puesta en marcha de hospitales de campaña e incluso espacios improvisados para la atención.

 

casos de dengue

 

Con el inicio de la pandemia, los reportes daban cuenta que Paraguay había puesto fin a su peor epidemia de dengue en décadas, a finales de marzo de 2020, dando paso a una situación que nada tiene que ver con las escasas notificaciones registradas por la Dirección General de Vigilancia de la Salud (DGVS) a lo largo de estos primeros meses de 2021.

 

El director del Servicio Nacional de Erradicación del Paludismo (Senepa), Hernán Rodríguez, había explicado a la agencia Efe que el pico máximo de 2020 se produjo a mediados de febrero, con unas 33.400 notificaciones por semana, mientras que este año la media está en 700 notificaciones aproximadamente.

 

«La cantidad de notificaciones es tan baja que, inclusive comparando con los últimos 11 años, desde 2010 hasta ahora, estamos con la menor cantidad de notificaciones de dengue a estas alturas del año», explicó por teléfono Rodríguez.

 

La notificación no implica la confirmación del caso, sino que funciona a modo de alerta para que las autoridades sanitarias procedan a encontrar más personas con síntomas, busquen y erradiquen los criaderos de mosquitos ‘aedes aegypti’ (transmisor del dengue, el zika y el chikunguña) y nebulicen con insecticidas para eliminar a los mosquitos adultos.

 

Entre enero y abril de 2021, se recibieron 9.229 notificaciones, de las que solo 799 fueron casos confirmados de dengue y dos de zika, según los datos de la DGVS.

 

“Hace un año, los números eran muy distintos, con 53 fallecidos y 27.597 casos confirmados y 177.104 casos notificados, según los datos ofrecidos entonces por el Ministerio de Salud al dar por terminada su peor epidemia en décadas” explicó el agente sanitario.

 

Cambio de estrategia

 

Para el director del Senepa, este cambio de tendencia se encuentra en la reducción de la movilidad a causa de las restricciones del coronavirus, pero sobre todo en un nuevo enfoque de lucha contra el dengue.

 

«El hecho de que las personas no se movilicen mucho ayuda bastante a hacer frente a la diseminación del virus del dengue, entendiendo que el virus del dengue es transmitido de una persona a otra a través de la picadura del ‘aedes aegyptis'», puntualizó Rodríguez en alusión a los meses de cuarentena y desplazamientos limitados.

 

Al margen de esta coyuntura impuesta por la pandemia, Rodríguez cree que el verdadero cambio procede de «la importancia del trabajo conjunto con las autoridades locales y las comisiones vecinales».

 

Durante mucho tiempo, la estrategia para erradicar el dengue fue la fumigación y la utilización de insecticidas, aunque su efecto era «momentáneo» y no eliminaba el verdadero problema: las larvas y los criaderos en recipientes con agua.

 

«Nos hace enfocar la estrategia en la comunidad. Hemos visitado varios municipios y varios intendentes presentándoles un plan de ordenación municipal sobre el dengue, elaborado por un experto en planes de ordenación municipal contratado por la Organización Panamericana de la Salud (OPS)», agregó el director del Senepa.

 

A eso se sumó una campaña de comunicación con un mensaje más directo para apelar a la conciencia ciudadana.

 

«Lo que mata no es el ñati’u, es el ñembotavy. ‘Ñati’u’ es mosquito en guaraní y ‘ñembotavy’ es hacerse el desentendido. El mensaje es que lo que mata no es el mosquito, sino desentenderse de la situación», aclaró Rodríguez.

 

De esta forma, lo que se quiere decir a la sociedad es que «sabe lo que se debe hacer y es cuestión de tomar la decisión y actuar».

 

Aprovechando la cuarentena el Senepa y el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) lanzaron la «minga hogareña» para que los estudiantes y sus familias buscaran, identificaran y eliminaran los criaderos de mosquitos en sus casas.

 

«A los niños se les inculca este tipo de prácticas y ya se quedan con la capacidad instalada», aseguró.

 

Éxito en la erradicación de otras enfermedades

 

Rodríguez se mostró optimista ante la posibilidad de un futuro sin dengue y señaló que se trata de «una cuestión de ajustar las estrategias, darle protagonismo a la comunidad, organizarse y coordinar las acciones».

 

El director del Senepa recordó que Paraguay «tiene una historia bastante exitosa de eliminación» de enfermedades, como la malaria, libre de trasmisión autóctona desde 2018, o la interrupción de la transmisión vectorial de la enfermedad de chagas, también en ese año.

 

Para conseguir el final del dengue, Rodríguez insistió en que el mejor camino es la erradicación de los criaderos.

 

«El dengue no tiene un tratamiento antiviral. Si lo hubiera, eventualmente, uno preferiría estar en su casa sano antes que estar en un hospital. La mejor decisión es la prevención. Para el dengue, en particular, la prevención es eliminar los criaderos de mosquitos«, recomendó.

 

Registros sobre el dengue

 

En el Paraguay, la primera epidemia de dengue sucedió en los años 1989-1990 con circulación del serotipo 1. Luego de un silencio epidemiológico de una década, se volvieron a observar casos de dengue a partir del año 2000, con una segunda gran epidemia en el año 2007 causado por el serotipo 3. A partir del 2009, se observó una co-circulación de serotipos 1 y 2, reportándose entre los años 2009 y 2015 un incremento sostenido de casos y una tercera gran epidemia en el año 2013, año en el que se notificaron 145.429 casos. Entre los más de 300.000 casos de dengue reportados al Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social (MSPBS) en este período se identificó más de un centenar de fallecidos.

 

 

LA REGION

NACIONALES

INTERNACIONALES

ULTIMAS NOTICIAS

Newsletter

Columnas