La pandemia del coronavirus provocó el doble de muertes de policías en Brasil que los crímenes en las calles

La pandemia de coronavirus provocó más muertes de policías en Brasil  que la violencia criminal durante 2020. Además, al menos uno de cada cuatro agentes de las fuerzas de seguridad debió alejarse de su puesto de trabajo debido a la enfermedad, según concluyó este viernes un relevamiento en base a datos oficiales del Foro de Seguridad Pública.

 

El coronavirus, provocó la muerte de un poco más de 383.000 personas en el país según el último balance del Ministerio de Salud del país y un  25 por ciento del total de efectivos fueron apartados por enfermedad al haber sido infectados.

 

El año pasado, 465 policías murieron por Covid-19, más que el doble de los 198 agentes que fallecieron en las calles, dice el informe realizado también por el Núcleo de Estudio de Violencia de la Universidad de Sao Paulo (USP) y dado a conocer por el canal de noticias GloboNews.

 

Los estados que cuentan con más muertes de policías en Brasil

 

Los estados con más policías fallecidos por la pandemia fueron Río de Janeiro, Amazonas y Pará, estos dos últimos en el norte amazónico.

 

Según los datos oficiales obtenidos con la Ley de Acceso a la Información, 126.154 policías fueron apartados por enfermedad tras haberse infectado con el virus durante el 2020, es decir, un 25 por ciento del total de las fuerzas de seguridad que dependen de los estados.

 

Asimismo, diferentes estudios comprobaron que la pandemia provoca mas muertes de policías en Brasil que los crímenes y la violencia en las calles.

 

«La gestión de la pandemia por parte del Gobierno nacional parecía ignorar al agente de seguridad que trabaja en contacto con la población y tiene riesgo constante de contaminación y de transmitir el virus a sus familiares«, dijo Bruno Manso, del Núcleo de Estudios de Violencia de la USP.

 

Debido a la cantidad de muertes de policías en Brasil, en marzo, dos meses después del inicio de la vacunación, los policías comenzaron a ser inmunizados junto con los docentes en los principales estados.

 

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— misionesonline.net (@misionesonline) April 23, 2021

 

Según las cifras difundidas diariamente por la Organización Mundial de la Salud (OMS), se reportaron en Brasil 14.167. 973 casos de infectados y 383.757 de muertos.

 

En relación al día anterior, se registraron 4.166 casos más de afectados por coronavirus en Brasil, que actualmente se encuentra en el puesto 3 de países con mayor cantidad de infectados.

 

Brasil es el segundo país con más óbitos asociados a la enfermedad, después apenas de Estados Unidos, y el tercero con más positivos, tras EE.UU. e India.

 

En este sentido, es la nación que más óbitos por covid-19 notificó en la última semana, con un total de 19.578 muertes, por encima de las 11.534 en India y las 4.986 en Estados Unidos, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS).

 

Esta segunda ola de la pandemia, más virulenta y mortal que la primera, llevó al sistema público de salud brasileño al borde del colapso, con buena parte de las unidades de cuidados intensivos desbordadas y en medio de la falta de medicamentos para mantener intubados a los pacientes graves.

 

Un estudio divulgado este jueves por la Universidad de Michigan, en Estados Unidos, y el centro de estudios económicos Fundación Getulio Vargas (FGV) de Brasil indicó que el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, usó sus poderes constitucionales para dificultar el combate a la pandemia.

 

“Bolsonaro interfirió en el Ministerio de Salud como nunca antes se vio en el periodo democrático. Intervino en protocolos de tratamiento y hasta en el modo de divulgación de los datos de la pandemia”, apuntó la profesora de la FGV Elize Massard, una de las autoras del estudio, según recogió el diario ‘Estadao’.

 

“Si el presidente hubiera escogido otros caminos, Brasil podría haber presentado un desempeño mucho mejor. Podríamos haber sido un ejemplo”, añadió.

 

Bolsonaro minimizó la peligrosidad del covid-19 y la tildó desde el inicio de la pandemia, como una simple “gripecita”. Además, censuró el uso de mascarilla, recomendó medicamentos no comprobados científicamente para combatir la enfermedad e incluso recurrió a la Justicia ante las restricciones a la movilidad impuestas por los gobiernos regionales y municipales para controlar la pandemia.

 

Por este motivo, el primer mandatario será investigado por la Justicia, ya que consideran que hizo un mal manejo de la pandemia y que el país tenía los medios necesario para haber atravesado de una mejor manera este contexto.

 

Con información de Télam