Vecinos del barrio Aguacates de Posadas, denuncian el impacto negativo en su calidad de vida por los altos ruidos y malos olores de algunos bares de la Costanera

En la Costanera de Posadas en los últimos meses se abrieron “Antares” y “Teyú”, nuevos bares con perfil moderno y eventos y recitales en plena pandemia. Sin embargo, vecinos del barrio aledaños a los mismos denuncian públicamente que esos negocios no respetan las normas y destruyen su calidad de vida.

 

“Antares” y “Teyú” llaman la atención de los jóvenes desde el primer día, a tal punto que los utilizan como lugar de encuentros y reuniones.

 

Pero el alto volumen de los recitales, la música a niveles insoportables hasta la madrugada y el olor a frito que penetra en las viviendas de quienes viven en los alrededores obligó a que elevaran distintos reclamos por ruidos y olores molestos que generan estos comercios.

 

A través de varias presentaciones suscriptas por los afectados ante la Municipalidad de Posadas, inspectores de la Dirección de Ambiente Urbano de la Secretaría de Salud constataron lo denunciado por los vecinos.

 

La carta firmada por los vecinos.

 

Empleando un decibelímetro, se detectaron 55db desde la ventana de la vivienda de Ignacio Valenzuela, uno de los denunciantes, según consta en el acta de inspección emitida por la Municipalidad de Posadas.

 

El acta de infracción.

 

A raíz de estas presentaciones, las autoridades le labraron un acta de infracción por superar los decibeles permitidos según la Ordenanza Vigente VIN°14 a uno de los propietarios de estos locales gastronómicos.

 

 

No obstante, los vecinos continúan con el reclamo. Ya que aseguran que nada cambió y que cada fin de semana se repite la escena: calles vecinales saturadas, olores que inundan el barrio y una incesante polución sonora, que incluso “hace vibrar paredes y ventanas”, cuentan.

 

“El problema que tenemos los vecinos que vivimos alrededor es que a partir de los miércoles ponen música muy alta o vienen bandas en vivo y yo que vivo a 60 metros del lugar, los ventanales de mi casa tiemblan. Por decibelímetros está comprobado que llegan a 80 cuando lo permitido es 40 y hasta determinada hora” explicó Bonifacio Tabares Kailar, vecino de los mencionados bares.

 

Además, hizo hincapié que la calle Guayrá sobre la cual queda su vivienda es angosta, por ende, al estacionar los distintos autos le impide una salida rápida en su vehículo si ocurre alguna urgencia. Otras de las cuestiones por las cuales elevaron los reclamos correspondientes a la Municipalidad de Posadas los vecinos son sobre el incumplimiento de los protocolos, ya que las personas en estos bares no utilizan barbijo y piden que las sanciones sean igualitarias para todos.

 

 

“Los reclamos se hicieron de forma reiterada, acá parece que hay influencia no sé de quién, pero no permiten que la Municipalidad controle y suspenda esto. No sé cuál sería la vía correspondiente para tener realmente una respuesta a nuestro reclamo. Cuando fuimos con la policía bajaron el volumen por un rato largo, pero después siguieron con lo mismo, es como que se sienten intocables” enfatizó Bonifacio.

LA REGION

NACIONALES

INTERNACIONALES

ULTIMAS NOTICIAS

Newsletter

Columnas