Hoy se cumplen 84 años de la muerte de Horacio Quiroga: El fin de una vida marcada por la tragedia

Horacio Quiroga fue uno de los grandes referentes de la literatura argentina y regional misionera y su obra sigue traspasando generaciones. Tras años de desgracias, un día como hoy, pero del año 1937 terminó con su vida.

 

 

La vida de Horacio Quiroga estuvo sumida en la tragedia prácticamente desde su niñez.

Horacio Silvestre Quiroga Forteza, era su nombre completo y nació un 31 de diciembre de 1878, en Salto Uruguay.

La infancia de Horacio quedó marcada por una serie de eventos trágicos como la muerte de su padre, Prudencio Quiroga, fruto de un disparo accidental, en una jornada de cacería, cuando Horacio tenía escasos dos meses de vida.

 

En el año 1891 su madre, Pastora Forteza, se volvió a casar con un hombre llamado Ascencio Barcos, quien luego de una parálisis causada por un derrame cerebral, se suicidó cuando Horacio tenía 18 años.

 

 

En 1900 la herencia de su padre le permitió viajar a París donde conoció al gran Rubén Darío poeta modernista de la época.

 

En junio de 1903 Quiroga se unió como fotógrafo a Leopoldo Lugones en una expedición a Misiones, financiada por el Ministerio de Educación, en la que planeaba investigar unas ruinas de las misiones jesuíticas.

 

 

Compró una chacra sobre la orilla del Alto Paraná y en 1908 se trasladó.

 

Allí instalado, se enamoró de una de sus alumnas de la cual, nacieron sus hijos Eglé Darío Quiroga

 

Quiroga comenzó la explotación de sus yerbales y al mismo tiempo fue nombrado Juez de Paz en el Registro Civil de San Ignacio.

 

 

Tras el suicidio de su esposa, Quiroga se trasladó con sus hijos a Buenos Aires, donde recibió un cargo de Secretario Contador en el Consulado General uruguayo en esa ciudad. Apareció en esta época uno de sus libros más famosos: Cuentos de la selva.

 

Su segunda esposa, Maria Elena Bravo, compañera de escuela de Eglé, con la cual se casó y retiró para Misiones definitivamente

 

quiroga horacio

Desesperado por el sufrimiento, consecuencia de un diagnóstico de cáncer, Horacio Quiroga una madrugada del19 de febrero de 1937, en presencia de un amigo, Horacio Quiroga bebió un vaso de cianuro que lo mató pocos minutos tras una horrible agonía llena de sufrimiento

 

Su cadáver fue velado en la Casa del Teatro de la Sociedad Argentina de Escritores (SADE).

Tiempo después, sus restos fueron repatriados a su país natal: Uruguay

Sin embargo, uno de los deseos de Quiroga era que cuando muriera su cuerpo fuera cremado y sus cenizas esparcidas en la selva misionera.

 

 

A pesar de su muerte, las desgracias siguieron asechando a la familia Quiroga: tiempo después Eglé Quiroga, hija mayor de Horacio, se suicidó, al igual que su amigo Leopoldo Lugones y finalmente, su hijo varón, Darío, en un arranque de desesperación en el año 1951.

 

LA REGION

NACIONALES

INTERNACIONALES

ULTIMAS NOTICIAS

Newsletter

Columnas