Reflexión del Centro Familiar Cristiano: “El nacimiento- los Reyes Magos”

No se sabe con certeza si los Reyes Magos eran sacerdotes ni cuántos eran, se cree que eran judíos que quedaron en Babilonia y esperaron la señal. En la época se le decía magos a las personas de clases educadas, de ciencia y estudiosos de los astros. El estar lejos de Jerusalén y de su sistema religioso les permitió a ellos ver lo que otros no veían, ir a donde otros no irían, en otras palabras no estaban contaminados, porque los religiosos conocían el hecho histórico por las profecías pero estos hombres recibieron una revelación, una señal y la siguieron.

“Cuando Jesús nació en Belén de Judea en días del rey Herodes, vinieron del oriente a Jerusalén unos magos, diciendo: ¿Dónde está el rey de los judíos, que ha nacido? Porque su estrella hemos visto en el oriente, y venimos a adorarle. Oyendo esto, el rey Herodes se turbó, y toda Jerusalén con él. Y convocados todos los principales sacerdotes, y los escribas del pueblo, les preguntó dónde había de nacer el Cristo. Ellos le dijeron: En Belén de Judea; porque así está escrito por el profeta: Y tú, Belén, de la tierra de Judá, No eres la más pequeña entre los príncipes de Judá; Porque de ti saldrá un guiador, Que apacentará[a] a mi pueblo Israel. Entonces Herodes, llamando en secreto a los magos, indagó de ellos diligentemente el tiempo de la aparición de la estrella; y enviándolos a Belén, dijo: Id allá y averiguad con diligencia acerca del niño; y cuando le halléis, hacédmelo saber, para que yo también vaya y le adore. Ellos, habiendo oído al rey, se fueron; y he aquí la estrella que habían visto en el oriente iba delante de ellos, hasta que, llegando, se detuvo sobre donde estaba el niño. Y al ver la estrella, se regocijaron con muy grande gozo. Y al entrar en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose, lo adoraron; y abriendo sus tesoros, le ofrecieron presentes: oro, incienso y mirra. Pero siendo avisados por revelación en sueños que no volviesen a Herodes, regresaron a su tierra por otro camino”. Mateo 2:1 – 12 (RVR60).

1- Dios no mandó a adorar a Jesús a los que estaban cerca sino a los que estaban lejos (Juan1:12 RVR)

Estas personas no se sabe si eran sacerdotes o cuantos eran, se cree que eran judíos que quedaron en Babilonia y esperaron la señal. En la época se le decía magos (en el griego magoi), que se refería a las personas de clases educadas, o sea personas de ciencia, estudiosos de los astros. Muy probablemente, los magos eran descendientes de quienes se enteraron por Daniel y otros judíos del Dios de Israel y del Mesías prometido. Estar lejos de Jerusalén y de su sistema religioso les permitió ver lo que otros no veían, ir a donde otros no irían, en otras palabras, no estaban contaminados. Los religiosos conocían el hecho histórico pero estos hombres recibieron una revelación, una señal y la siguieron.

2- Siempre que recibamos una palabra de parte de Dios se va a levantar un Herodes turbado para impedirlo.

Llegan a un palacio buscando a un rey por eso dan con Herodes, el representa a los enemigos que se levantan para impedir lo que Dios está planeando para nuestra vida. Cuando se levanten es señal de que vas por buen camino, que estás haciendo lo correcto. Generalmente los que se levantan en contra son los que nunca hacen nada, los que no tienen frutos. Nunca temas a un Herodes que se levanta, él puede tener armas, pero vos tenes la visión de Dios. Salmo 119:22-24 (NTV)

El que es portador de una herencia de Dios, que se prende de una promesa de Dios siempre tendrá enemigos, de su propósito, de esa palabra etc. Cuando una persona está dentro de un propósito es inevitable que los enemigos se levanten. Necesitamos a nuestros enemigos para no conformarnos ni estancarnos. El meditar en sus propósitos es sinónimo de corazón humillado y ante un corazón humillado el enemigo no tiene de donde agarrase.

3- Hay oportunidades escondidas y los planes de Dios no siempre son revelados a los que entienden mucho sino a los que creen mucho y entienden poco.

Las mejores oportunidades no se dan cuando las esperamos sino justamente cuando no lo esperamos para que provoque en nosotros la necesidad de buscar, de saber, de cambiar.

El tiempo y oportunidad de Dios casi siempre coincide con nuestra inoportunidad. Cuando no podemos, cuando no somos, es allí donde Dios puede manifestarse realmente. Si una persona se siente preparada, madura, lista y considera que le llego el tiempo, Dios no puede hacer nada. En el peor momento o la peor circunstancia es la que permite que seamos conscientes de que no podemos hacerlo y es allí en donde dependemos de Dios y él dice: Ahora podemos hacerlo. Los tiempos de Dios no tienen que ver con nuestra capacidad sino con nuestra incapacidad, y nuestra dependencia de Él.

4- No te detengas hasta llegar: Cuando Dios pone algo en tu corazón debes desarrollarlo.

Nótese que la estrella iba siempre delante de ellos, no ellos delante de la estrella. Muchas personas ignoran el papel y la función de Dios en sus actividades, se sienten imprescindibles hasta el punto de cambiar la visión o poner en duda el propósito de Dios. Si alteramos lo que Dios quiere, y cambiamos su agenda por la nuestra, empezamos a vivir por ambición y esto tarde o temprano termina mal. Los magos no se detuvieron hasta que la estrella se detuvo, muchas personas se detienen antes que la estrella y como consecuencia de esto su propósito se detiene, su llamado se frustra, su asignación se aborta. (Lucas 14: 28 – 30NTV)

No es cuestión de cuán rápido corras sino en no detenerte antes de tiempo, el enemigo siempre va a querer detenerte, desviarte, cambiarte, cansarte, mostrarte las injusticias que te han cometido, no pares, corre hacia donde Dios te quiere, no pares hasta que tu estrella se haya detenido. Muchas veces al llegar no es lo que pensamos, vemos animales, olor, pobreza, asi como encontraron los Magos a Jesus en el establo. Pero al ver a Jesús se crea la convicción en nuestro corazón que estamos en el lugar correcto.

5- Nunca entres a la casa de un Rey con las manos vacías.

El nivel más alto de adoración no tiene que ver con lo que decimos, sino con lo que hacemos en adoración, no podemos separar lo que damos a Dios (adoración) con lo que decimos. Ellos se postraron, se rindieron y adoraron, es decir reconocieron frente a quien estaban. No dejemos de abrir nuestros tesoros para El pues así El abre sus tesoros para nosotros. Lo que abres en la tierra El abre en los cielos. La medida en la que estés dispuesto a dar será la medida en la que vas a recibir.

6- Transformados por obediencia.

Estos hombres hasta aquí habían sido guiados por una estrella, pero al postrarse, adorar y abrir sus tesoros fueron abiertos también sus ojos y recibieron una revelación, o sea que lo que veían con sus ojos naturales ahora lo veían con sus ojos espirituales. Estos sabios del oriente fueron transformados, pues la luz que los guiaba desde afuera ahora los guiaba desde adentro (Mateo 2:12) una vez que se encontraron con Jesús fueron avisados por revelación. Es por revelación y discernimiento que Dios habla a nuestro espíritu. Hay un propósito profundo y eterno, el Señor nos trae primero por razonamiento, luego por vista y por ultimo por revelación. Una palabra de Dios vale más que mil razones humanas.

 

Que Dios te bendiga, te guarde de todo mal y tengas una semana de completa victoria!

Pastor Jorge Libutzki

Centro Familiar Cristiano Eldorado