El cura Raúl Sidders, quien está acusado de abuso sexual a una niña de un escuela Católica de La Plata, finalmente quedó detenido. Los hechos presuntamente habrían ocurrido entre los años 2004 y 2007 cuando la víctima tenía entre 11 y 14 años.
Pía Garralda – Red Ciudadana
El acusado se entregó en la Fiscalía de La Plata. “Esperábamos que lo hiciera, ya que eso ha expresado la Iglesia Católica: que están a disposición de la Justicia” expresó Pía Garralda, encargada de la defensa de la menor.
También manifestó la abogada: “Esta detención es un gran paso adelante en la lucha contra la impunidad de los abusos en la Iglesia Católica y en todos los gobiernos que han sido cómplices de la Iglesia en estos casos”.
En su declaración, Sidders alegó no conocer a la menor y que “de ninguna manera podría acercarse a un niño o niña porque es una persona arisca a las mujeres” y aprovechó la ocasión para manifestar su manifestación en contra de la legalización del aborto.
La denuncia de Rocío, la víctima, fue radicada el 7 de agosto del corriente año, luego de que un medio de prensa publicara testimonios sobre diferentes manifestaciones sobre hechos delictivos en el Colegio San Vicente de Paúl de la Ciudad de la Plata.
Esas manifestaciones se referían a abusos de poder, misoginia, discriminación, abuso sexual y violencia física hacia los niños y niñas. “Existe una responsabilidad muy importante del Estado en el control sobre la actuación de curas y monjas en los colegios católicos, donde lógicamente hay un montón de niños y niñas y no existe ningún tipo de control sobre su desempeño” agregó Garralda.
La víctima actualmente se encuentra en internación domiciliaria debido a las consecuencias que recayeron en su salud, está acompañada y contenida con atención psicológica y psiquiátrica; “está contenta por el avance de la Justicia” acotó su defensa.
En el 2008 el cura tenía en su contra una resolución del INADI, tras la emisión de un programa en La Plata, denominado “Ave María Purísima”, donde se manifestó contra la política de género y llamó “chirusas” al grupo feminista que llevaba adelante una manifestación.
Además, cuando era Capellán en Junín de los Andes tuvo problemas de discriminación hacia los pueblos originarios de esas tierras. “Aquí en La Plata tenemos un historial de curas abusadores, lamentablemente existen muchos casos que todavía no pudimos llevar a la Justicia, acá no solo hay una responsabilidad de la Iglesia Católica sino del Estado”, afirmó la abogada.
Sidders en Puerto Iguazú
El pasado mes de agosto, el sacerdote Raúl Anatolly Sidders que había sido trasladado a la diócesis de Puerto Iguazú fue denunciado por abuso sexual agravado ante el Juzgado de Garantías 2 de La Plata por una mujer que hoy tiene 27 años y que supuestamente había padecido los vejámenes en su adolescencia, cuando el sacerdote era el guía espiritual en el colegio que cursaba estudios.
La denuncia refiere a los abusos sexuales y acoso que la menor habría sufrido cuando el sacerdote cumplía funciones en el colegio San Vicente de Paul de La Plata. El presbítero permanecía en el Obispado de Iguazú desde mayo de 2020, sin cumplir funciones específicas, esperando además el nombramiento como capellán de Gendarmería Nacional en aquella ciudad.
En agosto, la misma abogada, Pia Garralda había manifestado: “Esperamos que la denuncia que efectuó la mujer se investigue rápidamente, con seriedad”, había dicho la abogada de la víctima, que públicamente aparece en una publicación nacional bajo el seudónimo de Rocío.
Ante la exposición pública de su imagen en los últimos días en la localidad bonaerense de Bella Vista, el sacerdote acusado se presentó a la Justicia y quedó detenido.
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