La mamá felina apareció de sorpresa en la puerta de la casa de quien le da comida todos los días, pero llegó acompañada.
La conmovedora historia entre una gata y la mujer que le da comer tiene lugar en Montreal, Canadá. Allí, la joven Lisianne halló un día en su jardín a una adorable gata negra a la que decidió comenzar a alimentar diariamente. Con el paso del tiempo, observó que su panza había aumentado y sospechó que estaba preñada. Sin embargo, poco después, la felina regresó sin rastro de su vientre hinchado.
Fue entonces que Lisianne se decidió a encontrar a los felinos y trató de ganarse la confianza de la madre, así que no solo se dedicó a alimentarla con comida especial para mascotas y también se acercaba para darle cariño. Un día, su trabajo dio resultado y encontró en la puerta de su casa a la gata junto a sus seis pequeñas crías.
Según contó la mujer a Love Meow, al principio los gatitos eran muy tímidos debido a su escaso contacto con otras personas, así que organizó un espacio en su hogar para cuidarlos y criarlos hasta que crezcan y alguna familia los quiera adoptar.
Finalmente, la joven decidió adoptar a la gata y llevó a los pequeños al refugio Chatons Orphelins Montréal donde son cuidados mientras encuentran una familia.
Fuente: La Mañana de Neuquén