Eldorado: miles de personas participaron de la «Caravana de la Luz»

En la tarde de ayer, en el marco del tradicional «Octubrillante o Fiesta de la Luz» que se realiza en la Capital del Trabajo cada 31 de octubre desde hace 6 años, este sábado se llevó a cabo la «Caravana de la Luz» para respetar los protocolos sanitarios en medio de la pandemia mundial.

 

Al respecto, el pastor Miguel Hundt de la Iglesia Bautista del Centro, a cargo de la organización del evento, manifestó que «estamos muy felices, porque la verdad que la participación superó nuestras expectativas, muchísimas familias y vecinos se sumaron a la Caravana de la Luz, y alcanzamos a tener una caravana de varios kilómetros de vehículos».

Y agregó «este año, que sería la sexta edición de Octubrillante o la Fiesta de la Luz en la ciudad de Eldorado, decidimos hacer una caravana para respetar los protocolos sanitarios en el marco de la pandemia que se está viviendo».

 

Además dijo «normalmente hacíamos eventos con juegos y regalos para los chicos, merienda, bandas en vivo y demás, pero este año por la pandemia tuvimos que cambiar el plan y nos fue más que bien».

 

 

«Desde el centro de la ciudad hasta el kilómetro 1 se llevó adelante una caravana con innumerable cantidad de vehículos, que con el sonar de bocinas, música y mucho color compartió en las calles el mensaje de que Jesús es la luz. Todo fue trasmitido y acompañado por una radio local y realmente pasamos una tarde genial» aseguró el pastor.

 

Hundt explicó que «Octubrillante» es mucho más que una fiesta para que nuestros niños no celebren la muerte. «¡Es la fiesta de la vida! Es una alternativa evangelística y contracultural que viene desarrollándose desde el año 2012 en todo el país y donde los niños son los protagonistas principales» indicó.

 

 

 

Hundt dijo también que «este es un evento donde celebramos la luz y la vida, tomando a Jesucristo como la luz del mundo. Nos parecía que debíamos hacer algo como contra propuesta para Hallowen que es algo que no es de nuestro país y que no está bueno, porque infunde el terror y el miedo en los niños durante todo el mes de octubre. Y aunque parece un juego, los niños pueden verse afectados por este tipo de propuestas foráneas».

 

 

Y finalizó «qué mejor entonces que enseñarles a los chicos en el marco de una hermosa y divertida actividad, que no deben temer porque Jesús que es la luz del mundo, y Él los ama y los libra de todo mal en todo momento».

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