Autoridades del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos del Gobierno de la provincia de Buenos Aires, representantes del Poder Judicial, Organismos de Derechos Humanos y representantes de los internos de distintas unidades carcelarias acordaron la habilitación de las visitas a los penales a partir del sábado 14 de noviembre.
Según un comunicado del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB), el acta del acuerdo fue rubricada luego de que presos alojados en los penales de Melchor Romero, Florencio Varela, Campana y San Martín iniciaran hoy un reclamo en demanda del restablecimiento de las visitas familiares presenciales suspendidas por el aislamiento impuesto para mitigar los efectos de la pandemia del coronavirus.
Cómo fue la jornada de motines en las prisiones bonaerenses
Como parte de la protesta, los detenidos se subieron a los techos de las unidades penitenciarias, provocaron incendios y agredieron a guardicárceles. Los incidentes quedaron registrados en varios videos que se viralizaron en las últimas horas.
En algunas imágenes, se los puede ver en los patios de los complejos protagonizando enfrentamientos con agenteso arrojando piedras y proyectiles, mientras de fondo se escuchan bombas de estruendo.
Además, ante los levantamientos, se debió desplegar al Grupo Especial Antimotines y Requisa (GEAR) para contener la revuelta.
Los voceros aclararon que desde los incidentes ocurridos en abril último en la Unidad Penal 23 de Florencio Varela, donde un interno murió por disparos de postas de plomo, este armamento fue prohibido para ser utilizado por los penitenciarios.
Al momento, se registraron personas heridas, pero no víctimas fatales, aunque fuentes policiales confirmaron que hay algunos pabellones de las prisiones de San Martín a los que aún no habían podido ingresar.
Familiares de los internos del penal de José León Suárez se acercaron a la puerta del lugar alrededor de las 16.30 y se sumaron al reclamo por el regreso de las visitas.
Un cordón policial protegía la entrada, mientras algunas personas arremetieron contra los oficiales, que lograron controlar la situación luego de arrojar gases lacrimógenos.
Tras los incidentes, un mediador sostuvo que en las próximas horas se iba a brindar una fecha para que se reanuden las visitas. Informó, a la vez, que todos los reclamos se estaban canalizandoa través de una “mesa de diálogo”. Por otra parte, en los penales de San Martín y Varela trabajaron el Juez de Garantía y un defensor público.
Este medio pudo saber que, cuando estalló la revuelta, las negociaciones por el regreso de las visitas estaban avanzadas y que se llevarían a cabo en las próximas semanas como prueba piloto, con protocolo y cupos.
Los antecedentes del conflicto
El conflicto empezó el lunes, cuando un grupo de internos de la Unidad número 42 de Florencio Varela, perteneciente al SPB, protagonizó un motín en reclamo del regreso de las visitas y de una serie de medidas que deberían adoptarse.
Los reclusos se atrincheraron en los pabellones con los brazos envueltos en frazadas y cuchillos. Exigieron la presencia de jueces y fiscales, además de representantes de Derechos Humanos ya que aseguraron que “nadie les da respuesta”, al tiempo que pidieron por “mejores condiciones de detención”.
Después de una hora, los presos dieron por finalizada la protesta, tras hablar con el fiscal a cargo del hecho Christian Granados, quien les explicó que el ministro de Justicia bonaerense Julio Alaky el jefe del SPB Xavier Areses trabajan en un protocolo para que vuelvan las visitas de los familiares a las cárceles, suspendidas hace siete meses por la pandemia de coronavirus y la exposición que podían tener los reclusos a la enfermedad.
El 18 de octubre se produjeron motines en las comisarías Florencio Varela 4ta de Bosques y 5ta de La Capilla, en exigencia de traslados debido a que denunciaban condiciones de hacinamiento. En la primera, incluso, habían tomado de rehén a un oficial, al que amenazaron con cuchillos, pero que finalmente resultó ileso.
El 22 de abril, un mes después del comienzo de la cuarentena por coronavirus en la Argentina, hubo una violenta revuelta en la Unidad Penitenciaria número 23 de Florencio Varela, donde uno los presos identificado como Federico Rey, de 23 años, murió de un disparo durante la represión desplegada para intentar restablecer el orden. Tres agentes del SPB terminaron desafectados e imputados por “homicidio”.
Fuente: Télam/TN