Posadas: planta recicladora fabrica chips de madera biodegradables para el embellecimiento de la ciudad

La ciudad de Posadas se encuentra embellecida y adornada con chips de madera. Éstos son fabricados en la Planta de Reciclaje de Nemesio Parma a través de la separación y reutilización de residuos de árboles.

Héctor Cardozo – Canal 12

 

Héctor Cardozo, gerente de gestión de Consorcio Público Intermunicipal de Gestión de Residuos Sólidos Urbanos, explicó cómo funciona la planta y qué tarea cumplen los chips de madera.

 

En lo que respecta al funcionamiento de la planta, Héctor Cardozo se refirió al trabajo realizado en el lugar, y señaló que el mismo se clasifica en tres fracciones, y cada una de ellas, tiene un tratamiento distinto.

 

Dentro de la primera, se utilizan ramas pequeñas y finas, y también hojas, que sirven para hacer compost (abono orgánico) para las plantas. En la segunda fracción,  ramas de tamaño intermedio. Se hacen chips blancos, que son más limpios, que luego se utiliza para teñirlos. Y en la tercera fracción, se cortan troncos para la utilización de leña para cocinar. Las mismas son distribuidas en merenderos.

 

 

En cuanto a la segunda fracción, para teñir a los chips, “se les da una determinada temperatura y presión para que los poros de la madera, se puedan abrir y a partir de allí, poder pintar y darles color”, contó Hector Cardozo.

 

El pigmento utilizado es biodegradable. Estos chips de madera una vez que adquieren el color, son utilizados para adornar distintos puntos de la ciudad de Posadas. Uno de los casos es en la plaza 9 de Julio, en donde se cubrieron los canteros con estos chips de colores. Otro lugar, fue a los pies  del monumento de Andrés Guacurarí. Allí, hicieron un ingenioso diseño geométrico delimitando las áreas con diferentes colores. Del mismo modo, adornaron en diferentes sectores de la Costanera, y en algunas rotondas de la ciudad, dándola de esta manera, más color a la capital misionera.

 

La cobertura obtenida a partir de los chips, que son producidos con los restos de podas y residuos de árboles, cumplen una doble función: en primer lugar, protege al suelo del sol, retiene la humedad de la zona, es un fertilizante, es también un controlador de malezas y con el tiempo los chips se degradan y pasan a ser abono. En segundo lugar, embellece diferentes sitios, a partir de diseños artísticos. “El suelo sin cubierta vegetal, pasa a tener color”, expresó el gerente.

LA REGION

NACIONALES

INTERNACIONALES

ULTIMAS NOTICIAS

Newsletter

Columnas