Se acerca el verano y existe socialmente la idea de “llegar en forma” a él, y aparece el deseo de bajar de peso de manera rápida y con el menor esfuerzo, tanto mujeres como hombres con sobrepeso u obesidad, que, muchas veces buscan alternativas como las pastillas para adelgazar, diuréticos, laxantes o los famosos “quemadores de grasas”, ignorando, en la mayoría de los casos, los efectos de estos productos en la salud.
Mucho se ha recomendado a la población sobre los riesgos que pueden provocar estos productos, pero, sin embargo, la gran publicidad que manejan estas empresas, sumado a la venta libre de los mismos y la desesperación de quien sufre una obesidad, en la mayoría de los casos lleva a que se consuman pastillas sin pensar más allá, es decir, en los efectos adversos que pueden provocar a expensas de hacernos “adelgazar”.
Ningún estudio sustenta la hipotética capacidad “quema-grasas” de estos productos, mientras que, sí existen indicios del riesgo que supone ingerirlos: sudoración, hipertensión, síncopes y parestesias. También puede generar pérdida de electrolitos, deshidratación, palpitaciones, dolor de cabeza, náuseas, insomnio, nerviosismo e insuficiencia hepática crónica.
Muchos de los productos en cuestión, utilizan la impronta de lo “natural” para crear mayor credibilidad por parte de la población, nombran algunos ingredientes como el té verde, jengibre, cafeína, tartrato de L-carnitina o celulosa microcristalina, pero más allá de la naturaleza de estos productos, científicamente ninguno de ellos ha demostrado ser efectivo para perder grasa corporal en sí.
Recordemos que:
- Antes de iniciar una dieta, que debe acompañarse de un cambio en el estilo de vida, se debe consultar con un profesional acreditado y especializado en el tema.
- Los productos milagrosos no existen: muchas veces perdemos peso al consumir pastillas, pero, porque las mismas nos suprimen el apetito, inhiben la absorción de nutrientes, ejercen efectos laxantes y diuréticos, pero son procesos totalmente reversibles, es decir, volvemos a comer y dejamos las pastillas y todo vuelve a estar igual que antes.
- La unida forma de “quemar”, o mejor dicho disminuir la grasa corporal es con alimentación adecuada y actividad física.
- Que algo sea “natural” no significa que sea seguro, efectivo o inocuo.
- Es arriesgado comprar complementos alimenticios a través de Internet.
- La salud es lo más importante, siempre pensemos en los efectos adversos y a largo plazo de todo lo que vamos a ingerir, ya sean alimentos, bebidas o productos en general.
Lic. Romina Krauss-Nutricionista
M.P. n° 147
Contacto: 03765-041351