José Artigas: Los más privilegiados serán los más infelices

En septiembre de 1815 José Artigas impulsó el “Reglamento provisorio de la provincia Oriental para el fomento de la campaña y seguridad de sus hacendados”, también conocido como el “Reglamento de tierras”, uno de los proyectos que mejor expresan en sentido de fuerte transformación social e igualitarismo que impulsaba el artiguismo para el Río de la Plata. Este reglamento tuvo una aplicación dispar y siempre acotado, debido a la omnipresencia de la guerra en la región, lo que impedía la consolidación de este tipo de políticas.

 

En el artículo 6°, el reglamento estipulaba repartir “los terrenos disponibles” entre “los más infelices”, los que debían ser “los más privilegiados”. ¿Quiénes eran estos? Pues el mismo artículo enumera que “los negros libres, los sambos de esta clase, los indios y los criollos pobres todos podrán ser agraciados en suertes de estancia, si con su trabajo y hombría de bien, propenden a su felicidad y la de la provincia”. También serían “agraciadas las viudas pobres si tuvieren hijos. Serán igualmente preferidos los casados a los americanos solteros y estos a cualquier extranjero” (artículo 7°).

 

Según la autora uruguaya Lucía Sala de Tourón, con este reglamento “la patria estaba escindida”, y parte de razón tenía. Artigas pretendía transformar la realidad de la campaña y de la vida rural mediante la incorporación de nuevos propietarios para las tierras. El tema es que esos propietarios no serían los miembros de las elites urbanas, sino los sectores tradicionalmente oprimidos. Este será, por ejemplo, uno de los motivos del levantamiento contra Artigas de parte de la elite correntina, en 1818, a la que derrotará Andrés Guacurarí en agosto de ese año.

 

 

Por Pablo Camogli