El hallazgo de un buzo de color azul, cuello redondo, talle GG, es tal vez hoy el único elemento de prueba que por ahora se vincula con la desaparición de menor César Daniel Tizato (15 años), en el campo “La Rosita”, lindante al barrio Pindapoy de San José.
Hoy hace 22 días que desapareció el adolescente, aquel domingo 30 de agosto, en la extensa chacra de 4.800 hectáreas, donde fue a cazar con un vecino de 41 años y que luego volvió sólo, tras dejar al chico en compañía de dos extraños en el camino, que le invitaron a seguir cazando, según su relato. De los extraños acompañantes del menor no se sabe nada, muy extraño todavía.
La indumentaria fue hallada en un cauce de agua que desemboca en el arroyo Pindapoy, a unos 3.000 metros del lugar donde se separaron Daniel y su vecino, Richard Cristaldo. El buzo fue reconocido por la madre del adolescente y está siendo sometido a pericias por la Policía, aunque es un talle grande y el chico desaparecido es de contextura mediana.
Además, no coincide con la primera descripción que hizo la familia de César Daniel Tizato al momento de su desaparición, quién había dicho que tenía un buzo de color negro con capucha, cuando salió a cazar.
Hoy en 22 de búsqueda, la policía continuaba con los rastrillajes en el extenso predio, sin resultados positivos. Los uniformados, circunscribieron la búsqueda ahora en zonas cercanas donde fue hallado el buzo azul.
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