Irma Faraón, mamá de Cristián, señaló que hasta el momento no recibe el cuerpo de su hijo y cuestionó que esta no haya sido la primera vez en que uno de los estantes de ese supermercado haya estado a punto de caer. Sostuvo que en su antiguo local pasó algo similar, que podría haber generado un derrumbe de góndolas, pero que en ese momento su hijo y un amigo lograron sostener el estante. Por lo que reclamó justicia por la vida de su hijo menor, quien era su sostén.
La mujer visiblemente conmovida, señaló que su menor hijo había comprado ya la mercadería, pero que salió nuevamente por galletitas para compartir con ella. Fue momentos después, cuando se enteró de la triste noticia.
«Me avisaron los vecinos que mi hijo había tenido un accidente y cuando yo llego, mi hijo no estaba más. Me llevaron al Madariaga y nadie sabía nada. Pedí que llamaran al Favaloro y no me decían nada», recordó la madre de la víctima fatal para Radio Libertad.
La mujer señaló que gracias a la ayuda de un vecino es que pudo contactar con el médico que atendió a Cristián. «-El doctor me dijo: hicimos lo que pudimos pero su hijo no reaccionó. Tuvo un golpe muy fuerte, estuvo muy lastimado y agarró un paro-, pero no me quisieron mostrar a mi hijo. No sé cómo haré, no sé ni la hora en que traerán a mi Cristián. Me dijeron de las 10 hasta la media noche que traerían a mi hijo y sigo esperando», dijo entre llantos.
Para Irma esta no es la primera vez que el local comercial “El punto de encuentro” ubicado en la esquina de las calles 108 y 133, en el barrio Los Manantiales de Posadas muestra deficiencias en cuanto a la colocación de los estantes, en su anterior establecimiento sostuvo que en una oportunidad, Cristián y un amigo lograron sostener una de las góndolas para evitar su caída y que se genere el efecto dominó que en esta oportunidad desencadenó el terrible accidente.
Cuestionó que no se han cumplido las condiciones. «En ese mismo punto tenían cajas y se venía todo de arriba y Cristián, mi hijo, y otro chico lograron sujetar toda la estantería y ese día no pasó ninguna desgracia y cuando se mudaron allí (al nuevo local donde ocurrió la desgracia) hicieron igual solo recostaron los estantes. Yo no he visto, pero la misma autoridad dijo que no tenían tarugo y que debía ir entornillado y no tenía nada. Es un negocio irresponsable».
«Quiero justicia por mi hijo, porque no hay un negocio tan irresponsable que no tenga nada para ajustar los estantes», lamentó.
Sostuvo que está solicitando las investigaciones para que puedan esclarecer porqué el negocio no tenía tarugas para las góndolas, así como una habilitación de funcionamiento.
«No me dieron una solución y solo fue un final negativo. Cristián era mi bebé, mi hijo más chico. Yo solo pido justicia, yo no quiero plata, yo pido justicia por mi hijo. Si tengo que remover tierra lo haré».
Recordó que su hijo era trabajador, tenía buenos patrones y era muy querido.
«Mi hijo no tenía antecedentes penales, no era un chorro, él me cuidaba. Tenía 24 años y parecía más grande porque me cuidaba. Me salió a comprar mercadería y fue nuevamente a comprarme galletitas y desde allí no lo vi más».
Según fuentes policiales el joven que se encontraba gravemente herido cuando salió del local. Sufrió un “paro cardiorespiratorio”, que terminó con su vida camino al Hospital René Favaloro de Posadas.
La víctima fatal vivía en las esquinas de las avenidas Vivianco y Bustamente de la capital provincial, cerca del comercio.
Fueron dados de alta los jóvenes heridos
En las últimas horas recibieron el alta médica Lucas W. de 25 y el adolescente de 17 años, quienes se encontraban en el hospital Madariaga en virtud de que ayer, habían sufrido lesiones tras la caída de góndolas en un supermercado ubicado en las calles 108 y 133.
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